El 'Clásico' que disputarán este domingo Barcelona y Real Madrid el próximo domingo en el Camp Nou será el primero con público tras la pandemia. Un tirón para el negocio del estadio azulgrana, que aspira a reactivarse para obtener 119 millones de euros en ingresos de explotación esta temporada.
En la temporada 2019-20 el Barça ingresó 162 millones de euros por la explotación de su estadio. La pandemia cerró sus gradas al público y con ella se perdieron no solo taquillas, sino también ingresos por restauración y tiendas, lo que desplomó la facturación por ese concepto la pasada temporada 2020-21 a apenas 25 millones.
La recuperación económica que necesita el conjunto presidido por Joan Laporta, con una deuda reconocida de 1.350 millones de euros pasa por recuperar la máquina de ingresos del coliseo azulgrana: esta campaña tienen previsto 119 millones de euros en ingresos, 94 millones más que el curso anterior.
Estos cálculos son prudentes, ya que en el presupuesto del curso 2020-2021 la junta directiva de Laporta prevé una recuperación progresiva de la asistencia del Camp Nou que llegaría al 60% en el mes de febrero. De momento, prácticamente superado octubre, en ningún partido se ha alcanzado esta cifra. Tampoco ante el Valencia y el Dinamo de Kiev, ya con el 100% del aforo permitido.
En el encuentro de Liga del pasado domingo se citaron 47.317 espectadores y, en el del miércoles de Liga de Campeones, la cifra aún fue menor con 45.968. Mientras hubo una restricción del 40% de aforo el único partido en el que el Barça llegó al máximo de público permitido fue en el estreno de la Champions ante el Bayern de Múnich, cuando se citaron 39.737.
Pero el club azulgrana necesita recuperar los ingresos del día de partido cuanto antes a causa de su grave situación económica y todo eso arranca por un Camp Nou lleno, lo más posible, ante el eterno rival.
La entidad ha puesto esta temporada a disposición de los socios sin abono en lista de espera los 26.000 asientos de los abonados que decidieron solicitar una excedencia y para el 'Clásico' ha convocado un mosaico que ocupará todo el estadio, con la previsión de que el graderío esté lleno.
El lema será 'Barça, ara i sempre' (Barça, ahora y siempre) en la grada lateral del estadio junto a una fotografía de los jugadores haciendo piña, rodeada por los colores azulgranas gracias a las cartulinas azules y granates que se repartirán. Además, en los goles del Camp Nou se podrá leer 'Som-hi culers' (Vamos culers) de color amarillo. Un escenario para arropar a los pupilos del neerlandés Ronald Koeman y escenificar la vuelta del espectáculo.