Xavi Hernández aseguró que sigue teniendo la misma ilusión que cuando llegó al banquillo blaugrana y, un año después, cree que el trabajo hecho ha sido bueno y que ganar títulos, el objetivo marcado, es cuestión de "calma y paciencia".
"Sigo teniendo mucha ilusión, la misma que al inicio, las cosas se han hecho bien y es cuestión de calma y de paciencia. En la 'Champions' no hemos dado la talla, es la realidad, pero estamos trabajando bien. Es un proceso que necesita tiempo y paciencia", valoró el técnico blaugrana.
Xavi aseguró que ser entrenador del Barça es "estresante" pero que también "se disfruta". "Al final, estás en el Barça, en casa, y cuando estás siendo juzgado y criticado y siendo el foco, no es fácil de manejar pero intento ser fuerte y de alguna manera positivo para darle la vuelta definitivamente a esta temporada", apuntó.
"El entrenador está expuesto a resultados, también con unas expectativas muy altas, se han generado unas expectativas muy fuerte y va a depender de los resultados. En Liga vamos bien encaminados, las competiciones nacionales están ahí, vamos líderes de una Liga que nos hace ilusión y vamos a competir la Liga Europa", aseguró.
Tiene claro que el objetivo es "ganar títulos" esta temporada. "Se ha hecho equipo para eso, el objetivo es claro. La liga gana más importancia todavía siendo eliminados de la 'Champions'. Ojalá quedemos primero nosotros, el objetivo es ser campeones", comentó.
En este sentido, ve muy importante haber llegado líderes al parón, para la calma del entorno. "Ha ido bien la cosa, ahora tenemos mes y medio sin competición, estamos con ilusión de ver el Mundial pero preparando la segunda parte de la temporada, que será muy dura. Los jugadores van a venir de la exigencia del Mundial", avisó.
En cuanto a su primer aniversario como técnico culé, reconoció que parece que haya sido más tiempo. "Estos días desconecto, lo necesitaba también. Hizo ayer un año de mi llegada a Can Barça y ha sido como si fueran muchos años más. Sensación de no parar, de estrés diario, cosas a solucionar cada día. Ha sido una montaña rusa de emociones, lo está siendo todavía", se sinceró.
Por otro lado, ve "excesiva" la sanción de tres partidos a Robert Lewandowski tras su gesto del dedo en la nariz, tras ser expulsado en el partido contra el Almería. "Vamos a recurrir, creemos que es una sanción excesiva. Fue un gesto creo que además impulsivo, él lo explicó muy bien. Además Robert es un ejemplo de conducta, siempre", valoró.