Robert Lewandowski ya conoce las consecuencias de su polémico gesto en el partido contra Osasuna tras ser expulsado por Gil Manzano. Tras ver la segunda amarilla el polaco se llevó la mano a la nariz y esto ha sido sancionado con tres partidos, uno por la expulsión y dos por la desconsideración al árbitro.
La resolución de Competición, que desestima las alegaciones presentadas por el Barcelona, impone un partido a Lewandowski por su expulsión por doble amonestación (m.11 y m.31) y dos por actitudes de menosprecio o desconsideración hacia los árbitros, en aplicación del artículo 124 del código disciplinario de la RFEF.
El acta del árbitro Jesús Gil Manzano reflejó que "una vez expulsado y cuando se dirigía hacia la salida del campo, el jugador realizó dos veces un gesto de desaprobación de la decisión arbitral, consistente en llevarse el dedo a la nariz, y apuntando después con el pulgar hacia el árbitro".
"Cuando se disponía a abandonar el terreno de juego, repitió de nuevo el gesto mirando hacia el árbitro asistente Nº 1 y delante del cuarto árbitro", añade el acta.
Piqué fue expulsado en el descanso del partido en El Sadar por decirle a Gil Manzano eres "el árbitro que más ha jodido" al conjunto azulgrana "con diferencia", según redactó éste en el acta, en el que agregó que el citado futbolista, una vez sancionado, también le dijo: "¡Es una puta vergüenza, me cago en tu puta madre!".
Piqué, que había anunciado su retirada unos días antes, fue suplente en su último partido con el Barça y saltó del banquillo al terreno de juego tras la primera parte para protestar al árbitro, que siguió su camino hacia el túnel de vestuarios.
El Comité de Competición, en aplicación del artículo 99 del Código disciplinario, le impuso cuatro partidos por insultos, ofensas verbales y actitudes injuriosas.