Jovic ha sido un jugador que ha dado mucho que hablar en el Real Madrid, pero no por su juego ni sus goles, sino por temas extra deportivos que le tenían siempre en el punto de mira.
Tras protagonizar varias polémicas, el club blanco decidió ponerlo a la venta. Les costó 70 millones y hasta la fecha no ha demostrado que lo valgan.
El Nápoles podría haberse interesado por el serbio, según apuntan algunos medios italianos. Además, parece ser que se ha producido la primera toma de contacto entre el entorno del delantero y el club napolitano. Su agente, Fali Ramadani, habría tenido una reunión con la directiva en la que se trató el tema.
Se valoran las dos opciones, compra y cesión, aunque el club italiano prefiere la adquisición, pero eso sí, la operación no podría tener un alto coste debido al carácter especial que va a tornar este verano el mercado de fichajes.
El Madrid está dispuesto a bajar el coste de la transacción. Tampoco va a hacer grandes fichajes y va a optar por rescatar a los cedidos por lo que necesita hueco para hacer fichas.
Su rendimiento en la temporada regular no estaba siendo bueno, no disputaba muchos minutos y los que tenía no los aprovechaba. Su debacle vino en el confinamiento. Primero se fue a Serbia, con el permiso del club, pero se saltó las normas de confinamiento de su país y fue sancionado.
Estando confinado, en un accidente doméstico, al caer de la terraza se lesionó el hueso calcáneo del pie derecho. Por lo que Zidane no podría contar con él a la vuelta.
Lo que más indignó al madridismo y que puso en riesgo la salud de sus compañeros fue una barbacoa con otros dos jugadores, uno del Atlético de Madrid y otro del Getafe. Esto iba totalmente en contra del protocolo de La Liga y de las autoridades sanitarias. En un momento dado se llegó a plantear que los futbolistas se concentraran por este mismo motivo, evitar que tuvieran contacto con otras personas que no fuera sus compañeros.