Neymar salió llorando del partido que disputó ante el Saint-Étienne. En una entrada del rival, el brasileño pisó mal el tobillo al caer y el jugador comenzó a proferir alaridos de dolor. Enseguida el equipo se dio cuenta de la gravedad del asunto y entraron las asistencias.
El delantero del PSG tuvo que abandonar el campo en camilla y entre un mar de lágrimas al saber que de nuevo una lesión le apartará de los terrenos de juego. Precisamente era el tobillo una dolencia de la que ya ha sido operado en dos ocasiones, aunque en este caso se trata del izquierdo el que hasta el momento no ha sufrido lesión.
Esto se le suma a una mala racha del brasileño en el campo. El inicio de temporada no está siendo del todo bueno y sus actuaciones sobre el verde han pasado inadvertido siendo objeto de algunas críticas de los aficionados sobre todo por imágenes como las que se dieron ante el Manchester City.
Se desconoce el alcance de la lesión y habrá que esperar a las primeras pruebas, aunque por sus gestos de dolor se ve que puede ser algo serio. Veremos si todo se queda en un susto o estamos ante otra lesión de gravedad de Neymar. Lo que sí se sabe es que abandonó el estadio con muletas y sin poder apoyar el pie.
El brasileño se expresó en su cuenta de Instagram tras salir en camilla del estadio. "Toca recuperarse. Lamentablemente estos contratiempos forman parte de la vida de un atleta. Ahora tengo que levantar la cabeza y avanzar. Volveré mejor y más fuerte", indicó el jugador, que en una de las tres fotos que colgó en esa red social aparece en el suelo con signos de dolor.
El París Saint Germain (PSG) se impuso por 1-3 en su visita al Saint-Etienne gracias a las asistencias del argentino Lionel Messi que endulzaron el debut del español Sergio Ramos. Los parisinos dominaron con claridad durante todo el partido, aunque el marcador se le resistió en principio. Sergio Ramos que hizo su debut apenas tuvo trabajo en defensa y cumplió en cuantas acciones participó.
En el minuto 23 el Saint-Etienne marcó por medio de Denis Bouanga, tras rematar un rebote dentro del área, pero el gol fue anulado por el colegiado Jerome Brisard por fuera de juego, aunque el VAR entró en liza y dio por válido el 1-0.
El PSG dominó en la posesión, 30-70, pero sin ocasiones claras de gol, salvo una de Kylian Mbappé, en el minuto 41, con un disparo que Etienne Green despeja en una gran parada. El equipo capitalino empató en el descuento antes del descanso. Lionel Messi lanza un tiro libre que Marquinhos remató de cabeza desde el centro del área para poner el empate a 1 en el 45+2.
En la segunda parte, el PSG incrementó su dominio y comenzaron a llegar las ocasiones de gol. Mbappé en el minuto 60 disparó alto, tras un rechace en el área pequeña. Messi, en el 69, disparó fuera de la portería. Por fin, en el 79, la conexión argentina funcionó. Messi centró al área para Ángel Di María que batió al portero por la izquierda subiendo el 1-2.
En la prolongación, Messi envió un centro bombeado al área que Marquinhos cabeceó cerca del poste izquierdo el 1-3 definitivo.