La relación entre Neymar y Mbappé no pasa por su mejor momento. Desde que el francés pidiera su salida, las rencillas afloran entre ellos cada semana y una muestra de ellos se vio en el partido contra el Mónaco donde el lanzador de los penaltis sale de nuevo a debate.
Christophe Galtier aseguró antes de comenzar la temporada que Kylian Mbappé iba a ser el primer lanzador del equipo, pero parece que el brasileño no acepta esta jerarquía. Neymar consideró que él lo había provocado la pena máxima y él se encargaría de ejecutarla.
Un penalti que de nuevo reabre heridas en el vestuario y que va a dar que hablar mucho ya que Mbappé se quedó para ser el líder indiscutible, pero a Neymar y parte del vestuario esto no le ha sentado nada bien y está dividido.
La inspiración del portero Alexander Nubel y la disciplina del Mónaco maniataron al París Saint Germain que se dejó los primeros puntos de la temporada en la Ligue 1 y que evitó un daño mayor, una derrota, gracias al penalti que transformó Neymar (1-1).
Sigue como dominador el conjunto del Christophe Galtier en la competición, aunque ahora, sin pleno, gracias a la diferencia de puntos respecto al Marsella y el Lens que también tienen diez puntos. Es la ventaja que da al campeón haber anotado dieciocho goles en cuatro partidos. Seis de ellos de Neymar que no tuvo que discutir con Kylian Mbappé el lanzamiento desde los once metros. Él provocó la acción, él lo ejecutó.
Fue así como el París Saint Germain encontró cierto alivio en un duelo que se le enquistó desde el principio ante un rival que languidecía por su mal arranque en el curso.
Con calma por la autoridad incontestable que ha mostrado en el arranque de curso, el campeón francés encaró el compromiso sin el carácter arrollador de otras veces. Cuando quiso acelerar ya estaba inmerso el cuadro de Christophe Galtier en el ritmo que había adoptado el Mónaco al que los resultados le han metido en la duda.