Betis y Valencia se miden en la final de la Copa del Rey. El partido, que se podrá seguir en directo en Telecinco y mitele.es a las 22.00, tendrá muchos frentes a analizar. Uno de ellos es el pasado valencianista que los tres capitanes en la actualidad del conjunto verdiblanco. Joaquín Sánchez, el mexicano Andrés Guardado y Sergio Canales son imprescindibles para Pellegrini, pero en su día también lo fueron para los che.
Cuando este sábado salten a La Cartuja Betis y Valencia para jugar la final de la Copa del Rey, lo harán viejos conocidos de la afición valencianista que ahora son piezas fundamentales en los esquemas de Pellegrini y, en el caso de Joaquín, emblema del beticismo a sus cuarenta años y más de novecientos partidos en sus piernas.
De ellos, más de 150 los jugó en Mestalla en los cinco años en los que se enfundó la camiseta valencianista tras su polémico y rocambolesco fichaje en 2006 por el que llegó a Valencia como fichaje más caro de la historia del club -25 millones- tras la maniobra de presión por la que el presidente bético lo 'traspasó' durante una noche al Albacete.
Joaquín respondió a las expectativas en sus años valencianistas que tuvieron un triste final por su choque frontal con Ronald Koeman, quien llegó a tenerlo calentando la casi totalidad de la final copera que el Valencia le ganó al Getafe en la 2007-2008 en el Vicente Calderón para no darle ni un minuto: el neerlandés fue destituido al poco tiempo y el portuense fichó por el Málaga en julio de 2011.
Joaquín y Canales se cruzaron, ya que el cántabro llegó cedido a Mestalla el 4 de agosto de 2011 procedente del Real Madrid y con una opción de compra que los valencianistas ejercieron un año más tarde por un importe de siete millones y medio de euros y con un contrato hasta el 30 de junio de 2017.
Su paso por Valencia estuvo marcado por dos graves roturas del ligamento cruzado de la rodilla derecha por las que tuvo que ser intervenido, la primera en octubre de 2011 que le mantuvo cinco meses de baja y una recaída en abril de abril de 2012 por la que se perdió el resto de la temporada.
Volvió a jugar el 23 de enero de 2013, nueve meses y tres días después de su segunda lesión, alternó titularidad y suplencias con Dujkic en el banquillo, aunque cuando se asentó, el serbio fue destituido y llegó el argentino Juan Antonio Pizzi con el que perdió protagonismo y salió en el mercado invernal de 2014 rumbo a la Real Sociedad, donde cumplió cuatro temporadas y media a pleno rendimiento antes de recalar en el Betis.
En mayo de 2012, llegó a Valencia Andrés Guardado, libre tras finalizar su contrato con el Deportivo de La Coruña y, tras empezar con el argentino Mauricio Pellegrino como volante zurdo, retrasó su posición al lateral con Ernesto Valverde, con el que se clasificó para la Liga Europa, y fue bajando su participación con Miroslav Dujkic y Pizzi hasta su marcha al Bayer Leverkusen alemán en 2014 y al PSV holandés antes de llegar al Betis.
También tuvo un paso notable por Mestalla el central Víctor Ruiz (2011-2014), quien llegó procedente del Nápoles italiano, que lo había fichado por unos seis millones de euros al Espanyol del argentino Mauricio Pochettino, quien formó con el zaguero catalán y Nico Pareja una de sus más solventes centros de la defensa.
A Valencia llegó el 30 de agosto de 2011 por unos 8 millones de euros y se convirtió en pieza clave del esquema de Unai Emery junto a Adil Rami, también llegado ese mismo verano; y con la llegada de Ernesto Valverde al banquillo jugó varios partidos en la demarcación de centrocampista defensivo.
En agosto de 2014, Víctor Ruiz fue traspasado al Villarreal, donde completó cinco temporadas antes de su llegada al Besiktas turco, última escala del futbolista catalán hasta su llegada al Betis en el verano de 2020.
Con relevante papel en los esquemas de Pellegrini y menor pasado 'che', está el delantero Borja Iglesias, quien llegó a la cantera valencianista con catorce años procedente de su Santiago natal en 2007 y donde coincidió en el ataque con Paco Alcácer antes de fichar por el Villarreal y, tres años más tarde, por el Celta.
No estará en la final por lesión el lateral Martín Montoya, quien recaló por vez primera en el Betis en el mercado de invierno de la 2015-2016 procedente del Ínter de Milán, que en julio de 2016 firmó libre por el Valencia y que, tras su traspaso por siete millones al Brighton inglés en 2018, volvió al Villamarín en el verano de 2020.