La dura derrota ante el PSG en el Camp Nou ha significado el cuarto, y puede que definitivo, mazazo para Leo Messi en Champions. Un duro varapalo que se une al del Bayern en la última edición, pero también a las de Liverpool y Roma los años anteriores. Cuatro decepciones que pueden acabar con el capitán argentino fuera del FC Barcelona este verano para tratar de ponerle remedio.
Hay que remontarse a 2018 para encontrar el inicio del ocaso de Leo Messi en Champions. El FC Barcelona viajaba a Roma con la tranquilidad del 4-1 de la ida, pero en un partido esperpéntico, el conjunto azulgrana quedaba eliminado por el conjunto romano. Un encuentro donde el argentino estuvo desaparecido y que le dejó muy tocado, tal y como él mismo contó en varias entrevistas posteriores.
Al año siguiente, otro mazazo. Esta vez fue ante el Liverpool. Leo Messi brilló con un doblete en el partido de ida y el conjunto azulgrana viajaba hasta Liverpool con la tranquilidad del 3-0. De nuevo, un partido para olvidar, 4-0 y el FC Barcelona, de nuevo eliminado. Otra vez, el argentino desaparecido, impasible y de nuevo otro gran varapalo del que le costó mucho recuperarse, más incluso que el de Roma.
El verano pasado, otra lección de realidad, puede que la más grande hasta la fecha. El todopoderoso Bayern de Munich, que acabó ganando el 'sextete' la semana pasada, le endosaba un humillante 8-2 que caía como un jarro de agua fría sobre el capitán azulgrana, que de nuevo estuvo ausente.
En la noche de este martes, ante el PSG, acabó por definirse su enemistad con la Champions League. Pese a que marcó desde el punto de penalti, el argentino volvía a ver cómo regresaban los fantasmas del pasado y el conjunto francés acababa remontando hasta volverse a casa con un 1-4 y con prácticamente medio billete a la siguiente fase. Y para colmo, fue testigo directo de la confirmación de Mbappé como futuro heredero a su trono.
Cuatro decepciones que pesarán mucho a la hora de que Leo Messi se replanté su futuro dentro de unos meses. El jugador argentino lo tiene claro, quiere volver a ganar la Champions y sabe que no puede conseguirlo si se queda en el FC Barcelona. El propio PSG y el Manchester City parecen las dos opciones más viables para tratar de conseguirlo, aunque obviamente ninguna de ellas es segura al 100%.