Florentino Pérez no olvida la traición de Kylian Mbappé al Real Madrid y es que la afición del club blanco se quedó muy tocada tras la negativa del delantero francés a marcharse a la capital española tras meses de negociaciones, sobre todo, porque todo apuntaba a que se lograría fraguar un acuerdo.
El presidente del Real Madrid ha sido siempre muy crítico con Mbappé, pues en casi todos los actos públicos en los que ha aparecido este verano ha lanzado algún dardo al jugador del PSG. Entre ellos destacan la pulla sobre el dinero y los valores que lanzó Florentino después de conquistar ‘la decimocuarta’.
Meses después de lo sucedido, el máximo dirigente del club blanco sigue sin perdonar la negativa de Mbappé a su equipo. Mientras firmaba unos autógrafos para algunos aficionados, un madridista le pidió que no intentara volver a ficha al jugador francés después de todo lo ocurrido.
Como respuesta, Florentino, entre risas, aseguro que Mbappé ya estará arrepentido de su decisión de quedarse en el PSG.
Los 80 millones de euros al Mónaco para arrebatar al PSG a una de las perlas francesas, el mediocentro Aurélien Tchouaméni, marcan las intenciones de un Real Madrid que había elegido a Kylian Mbappé como la gran perla de su proyecto pero los largos meses de negociaciones tuvieron el final más inesperado. Cuando tras innumerables presiones se acercaba el momento de libertad, el astro francés optó por renovar su contrato con el club parisino y renunciar al que había confesado públicamente era el sueño de su infancia.
Sin el deseado Mbappé para completar una delantera temible, junto a Vinícius y Benzema, el Real Madrid no ha activado ningún plan B. Ni la salida de Luka Jovic, rumbo al Fiorentina, el fin de ciclo esperado de Gareth Bale, la venta de Borja Mayoral al Getafe (10 millones de euros) y el deseo de dar salida a Mariano Díaz, ha provocado la llegada de un 9.
Florentino Pérez no quiere nadie que compita con su gran líder, Benzema, que será el nuevo primer capitán del equipo. No entró en la puja por Haaland y Ancelotti ya inventa soluciones ante la falta de efectivos con Eden Hazard de falso 9. Ya sin la placa en el tobillo que tanto le condicionó sus años vestido de blanco, es el 'ahora o nunca' para que vuelva a brillar la estrella belga que se apagó en el firmamento madridista.