Jonas Vingegaard 'desapareció' de la faz de la tierra durante meses tras ganar el Tour de Francia. No tener ninguna noticia de él dio lugar a muchas especulaciones, la principal, problemas a la hora de gestionar la fama. El danés ha hablado de su 'retiro' y ha preferido tomárselo a risa.
"Las informaciones fueron exageradas. Ni exploté, ni bomba mental, sólo necesitaba un descanso, eso es todo. No hubo problemas, simplemente descansé y disfruté de un tiempo de calidad con mi familia y amigos. Disfruté de una barbacoa, una copa de vino o una cerveza, no necesito mucho para ser feliz, incluso si he ganado el Tour de Francia", confesó Vingegaard en una entrevista al portal 'cyclingnews.com'.
Tras su victoria en julio en la 'Grande Boucle' y su recibimiento en Copenhague, el corredor de 25 años no volvió a participar en ninguna carrera hasta finales de septiembre cuando estuvo en la Vuelta a Croacia. También descartó los Mundiales de Australia porque habría sido "una pérdida de tiempo". "El recorrido no me convenía", admitió.
El danés apuntó que se ve "diferente a muchas personas" y que todos deberían "tener derecho a hacer lo que creen que es correcto para ellos". "No mucha gente piensa que merecía tomarme un tiempo libre adicional en el verano, pero aprecio a las personas que lo hacen. Mientras el equipo crea en lo que hacemos y obtengamos los resultados cuando más importa, entonces somos felices", remarcó.
"Podría haber corrido, pero tenía la sensación de que necesitaba un descanso. Solo participé en una carrera fuera de mi calendario original, la Clásica Bretaña, y creo que terminé la temporada bastante bien y que me siento bien con respecto a 2023", sentenció Vingegaard.
Ahora, el ciclista del Jumbo-Visma espera defender su título en el Tour de Francia, pese a que desde el equipo se haya dejado caer la posibilidad de que no acuda el año que viene. "No hemos hablado en detalle con el equipo y no hemos hecho un plan final para 2023, pero la idea es volver al Tour. Me sorprendería si ese no fuera el plan", advierte.
"Ser el defensor del Tour siempre es difícil, pero estoy preparado para el desafío. Sé que será cada vez más difícil ganarlo, pero eso es parte del reto y ahora tengo la experiencia de ganar de mi lado. Sé que solo tengo que concentrarme en mí mismo para ser lo mejor que pueda en el Tour de Francia 2023", sentenció.