El máximo anotador de la historia de la NBA, LeBron James, llevaba lidiando toda la temporada con problemas en su tobillo izquierdo y ahora será baja indefinida para los Lakers. Los de los Ángeles se quedan sin su rayo de luz justo cuando se veían con más fuerzas que nunca para empujar y meterse definitivamente en la pelea por los playoffs en el igualado Oeste, donde se encuentran duodécimos a falta de 21 partidos con un balance de 29-32.
La lesión de LeBron han hecho que salten todas las alarmas en los Lakers, pues nunca es buen tiempo para hacerse daño y menos en un jugador de 38 años clave en su equipo. La imagen durante el partido frente a los Mavericks no era buena y el primer pronóstico después de realizar pruebas médicas tampoco lo es. El '6' es baja indefinida, con el miedo a perderse un largo periodo de tiempo.
El propio jugador ha hecho una publicación vía historias de su cuenta de Instagram donde no ha transmitido optimismo a sus seguidores: “Esto apesta”, publicaba junto a una imagen con su maltrecho pie vendado.
Los precedentes sin LeBron no son nada esperanzadores para el equipo de Darvin Ham, con un 5-9 negativo esta temporada sin el ‘Rey’ y un 36-62 total para la franquicia angelina cuando no ha estado el ‘6’, con promedios de 29,5 puntos, 8,4 rebotes y 7 asistencias esta temporada.
La prolongada ausencia de ‘Bron’ significa más responsabilidad para Anthony Davis y D’Angelo Russell, mientras que Trey Brown Jr. deberá asumir más minutos en lugar de LeBron en una rotación en la que Ham también puede optar para suplir al ‘6’ a un Rui Hachimura que ha dejado más sombras que luces hasta ahora. Otra opción como también apunta Charania es un quinteto con dos bases con Russell y Dennis Schröder.
Ninguna combinación podrá llenar el vacío de LeBron James. Su lesión indefinida supone un drama que puede desembocar en tragedia. Las ilusiones de los Lakers esta temporada se pueden haber acabado.