Si, esta semana, Fernando Simón anunciaba que es posible que, en España, “pronto” se pueda dejar de usar la mascarilla en los espacios exteriores (de ninguna manera en los interiores), Israel ha tomado la delantera y también ha dicho el adiós definitivo a la mascarilla en los sitios cerrados.
Durante toda la pandemia, este país ha ido a la cabeza en la intensa lucha contra el covid19 y, gracias a la rapidez en su campaña de vacunación, los ciudadanos israelitas pudieron quitarse el ‘tapabocas’ en la calle el pasado mes de abril de 2021. Las multitudes podían volver a pasear con la cara al aire libre y, ahora, su Ministerio de Sanidad ha dado ésta otra buena noticia.
Gracias a los buenos datos en cuanto a los contagios y las muertes registradas por covid en las últimas semanas, el Gobierno ha levantado la obligación de llevar la mascarilla en los sitios cerrados. No tendrán que llevarse, por tanto, ni en las escuelas, ni en los puestos de trabajo, ni en los comercios ni instituciones.
Tampoco será obligatorio llevar esta prenda higiénica en el transporte público, si bien, desde el Ministerio han recomendado que se siga usando, pues ha quedado demostrada la baja incidencia de enfermedades con respecto a otros años que pueden tener su origen en las redes de metro o autobús.
El adiós de los israelitas a la mascarilla tendrá dos excepciones: se seguirá usando en los hospitales y centros sanitarios y para aquellos turistas que lleguen al país sin haberse vacunado previamente.