Increíble suceso en Houston, Texas, Estados Unidos. Un hombre de 29 años recibió un disparo mientras conducía por una autopista y murió en el acto. Con él viajaban sus dos hijos pequeños, que saltaron al volante y consiguieron hacerse con el control del coche.
Los niños -de 6 y 8 años- detuvieron el vehiculo a un lado de la autopista sin provocar ningún accidente. La policía no tiene ninguna pista sobre el origen de lo ocurrido y pide la colaboración ciudadana para poder dar con la persona que efectuó el disparo mortal.
Los hechos ocurrieron este sábado en el área de la I-10 y Federal Road. Los dos menores vieron cómo su padre se desplomaba sobre el volante, según la policía de Houston. Los niños apartaron el vehículo de los carriles principales, conduciendo aproximadamente un kilómetro, y lo detuvieron en una carretera secundaria.
Una vez el vehículo se detuvo, los pequeños corrieron en busca de ayuda. La policía ha reconocido la rapidez de los niños para intervenir y aseguró que sus acciones pudieron haber evitado una mayor tragedia en la concurrida autopista.
"No sabemos si fue alguien realmente tratando de atrapar a estos individuos. Oraciones por su familia. Los niños están a salvo", dijo el teniente R. Willkens del departamento de policía de Houston. El tiroteo de East Freeway fue al menos el tercer incidente violento que involucró disparos en la ciudad en un período de 12 horas. Se cree que ninguno de los incidentes está relacionado.