Escaparates rotos, contenedores incendiados, barricadas, lanzamientos de objetos y cargas policiales con un saldo de 125 heridos y 28 detenidos en toda Cataluña. Las protestas de los independentistas radicales alcanzaron una violencia nunca vista. Mientras el Gobierno advierte que no consentirá esta “violencia generalizada” que busca romper la convivencia pacífica, los CDR aseguran que la única violencia es la de las fuerzas de seguridad y que “no hay retorno”.
En un comunicado publicado vía Twitter, los CDR culpan a las fuerzas de seguridad, autonómicas y dependientes del estado, de causar la violencia anoche en las calles catalanas, donde los independentistas más violentos se echaron a las calles para protestar por la sentencia del procés.
Quemaron contenedores, hicieron barricadas, lanzaron objetos, rompieron escaparates en las calles más céntricas de Barcelona y también del resto de capitales de provincias. Los independentistas estaban preparados perfectamente para la batalla campal, encapuchados y hasta con cascos de moto. Los antidisturbios respondieron con cargas. El enfrentamiento entre unos y otros se extendió hasta las tres de la madrugada en Barcelona. En el resto de ciudades terminó un poco antes.
Los vecinos no dan crédito a lo que ven. “Joder es nuestra casa…” se escucha en un vídeo que muestra una tienda ardiendo. Otros intentan apagar las llamas hasta que lleguen los bomberos y son atacados por los independentistas.
El Gobierno emitió anoche un comunicadoGobiernocomunicado en el que habla de violencia organizada para “romper la convivencia en Cataluña” y asegura que actuará para garantizar la seguridad de la gente.
Los CDR en un comunicado aseguran que ellos no fueron violentos. “La única violencia fue la de los Mossos y la Policía”.
Aseguran que “no hay retorno”, que la sentencia del procés ha sido la chispa y piden la dimisión del conceller de Interior, Miquel Buch, por mandar a los antidisturbios. Insisten en que "no se tiene que caer en la trampa de aquellos que nos quieren desmovilizar con el falso argumento de la violencia".
Por su parte, el Govern ha anunciado una reunión de urgencia esta misma mañana.
El saldo de la batalla campal ha sido de 125 heridos y 28 detenidos en toda Cataluña. De los heridos, 74 se dieron en Barcelona. En Lleida, se han realizado 15 asistencias; en Gurb (Barcelona) 14, y en Tarragona 11. En Girona, se ha atendido a siete personas; en Sabadell (Barcelona) dos, y en Mollet del Vallès (Barcelona) dos.