‘’Ha sido práctica de la masonería a través de los tiempos el negar sus actividades políticas y su importancia fuera de las logias y, amparándose en el prestigio alcanzado por algunos masones, el presentarla como algo inocuo y sin trascendencia, pero los que en España han vivido la masonería y están en el secreto de cómo, a través de las logias, se fraguó su decadencia y se traicionó a la nación, se rebelan contra esta propaganda que pretende enmascarar lo que la masonería representa frente a la libertad e independencia de la nación. Esto suscita un problema sobre el que la gente nos interroga: ¿Es la masonería extranjera igual a la española, o es sólo la española la que reviste esas características de traición a la Patria?’’.
Así es como Iker Jiménez ha presentado su cierre habitual de ‘Cuarto Milenio’. El presentador, después de leer una página del libro ‘Masonería’ de J. Boor ha explicado que ''esas son las preguntas que se hacía Franco''
El presentador ha querido ahondar aún más en el tema: ‘’La gente hablaba de J.Boor sin saber que era Franco y hasta algunos antifranquistas decían que era un maravilloso estudio y claro cuando supieron que era Franco…(…) Este libro es la investigación ni más ni menos de la persona que manda en nuestro estado, en ese momento y durante prácticamente cuarenta años. Hace una investigación de la masonería en España y sobre todo en Europa y en el mundo, indicando lo que nos va a venir o por qué él es tapón contra la masonería’’.
Según indica el presentador, esta sería la muestra de cómo la masonería ha estado implicada en todas las tramas políticas.
Además, Iker Jiménez cuenta una anécdota sobre cómo durante la pandemia del coronavirus, fueron muchos los que le tacharon de masón a través de mensajes y publicaciones: ‘’Recibía veinte correos al día de cuál era mi logia, que yo era masón y que incluso yo tenía una logia donde iba Pedro Sánchez también’’.