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Gypsy Rose publicó un selfie nada más salir de prisión y la imagen ha tenido más de seis millones de interacciones. Acababa de cumplir ocho años de condena por la muerte de su madre, que alentó y que durante años hizo creer que Gypsy sufría graves enfermedades. Pero ¿Cómo se puede pasar de ser condenada a ídolo de masas? 'Código 10' nos da los detalles.
Su madre dijo que padecía leucemia y distrofia muscular, sin embargo, no era cierto. Dee Dee pudo hacerle muchas cosas a su hija para que pareciera enferma e incluso le suministró tratamientos y la sometió a cirugías que respaldaran su historia. Hasta le afeitaba la cabeza para que todos pensaran que estaba recibiendo quimioterapia. Dee Dee podría haber sufrido el síndrome de Munchausen, por el que las madres simulan enfermedades de sus hijos e incluso las provocan de alguna forma.
Mientras tanto, recibió donaciones anónimas, ayudas benéficas y también por parte del Gobierno.
Al parecer, Gypsy se dio cuenta de que no padecía estas enfermedades y conoció a un hombre a través de internet, a quien supuestamente habría convencido para llevar a cabo el crimen de su madre.
En el interrogatorio, Gypsy decía entre lágrimas: “No le hice anda a mi madre, quiero a mi madre, no debería haberla dejado nunca”. Mientras tanto, Nick fue quien dijo lo sucedió, culpando a Gypsy de convencerle para matar a su madre.
La joven cumplió condena, en concreto, 8 años. Pero desde su salida de prisión se ha convertido en un auténtico fenómeno de masas con más de diez millones de seguidores en Tik Tok. Ha protagonizado multitud de entrevistas, sus seguidores se han diparado y su popularidsad no para de crecer.
Durante su paso por prisión se estrenó el primer documental sobre su vida y el furor por su vidas es tal que empieza a recibir cartas de admiradores, entre ellas la de un profesor de secundaria que ahora es su actual marido: “Descubrieron que tenían mucho en común y se convirtió en un romance”, decía M.J. Pack.
Se trata de una periodista y amiga de Gypsy que nos contaba cómo fue el cambio de la opinión pública: “La gente empezó a darse cuenta de que era una prisionera, fue cuando la opinión pública empezó a cambiar”.
Por su parte, la periodista María Barea comentaba en directo en ‘Código 10’ que Gypsy ha pasado de ser una convicta a una “heroína” después de que contara detalles “del calvario que sufrió”, una narrativa que le ha hecho “empatizar con la audiencia”.
“Ha desarrollado una narrativa de arrepentimiento pero no hay que olvidar que se cometió un crimen muy grave”, concluía.