Resulta una paradoja que, justo a un mes de que llegue a las salas de cine la película que supondrá el punto y final de la saga Skywalker, podamos afirmar, sin miedo a equivocarnos, que estamos en el mejor momento para ser un fan de Star Wars. Primero porque parece que J.J. Abrams nos va a dar exactamente lo que queremos para terminar la saga de nueve películas, segundo porque parece que The Mandalorian (la serie de TV de Disney+) es una oda al espíritu clásico de Star Wars y, tercero, porque esta generación de consolas por fin tiene un videojuego digno de un universo muy, muy lejano.
Es cierto que las dos entregas de Battlefront han sido muy dignas, pero el hecho de tratarse de juegos únicamente enfocados a las batallas online multijugador ha hecho que desluzcan un poco. Además, estos últimos años ya nos hemos quedado huérfanos de un juego digno de Star Wars no una, sino dos veces. Primero cuando se suspendió 1313, el proyecto que tan bien pintaba de LucasArts, y luego con la cancelación del proyecto de Visceral Games. Así, sólo nos quedaba el clavo ardiendo de Respawn (los creadores de Titan Fall) para agarrarnos, y ha merecido la pena.
Tras exprimir todo lo que ofrece Star Wars Jedi Fallen Order podemos decir que, al menos para el que escribe este artículo, el juego ha cumplido con sus expectativas creadas. Por fin, un juego de acción para un solo jugador que vuelve a emocionarnos y que concentra todo el espíritu Star Wars que vivimos, por ejemplo, con algunas de las entregas de la saga Jedi Knight, en generaciones anteriores. Estamos ante un juego de acción en tercera persona que, como ya sabíamos, ha mezclado de manera desigual la exploración de un mundo semi-abierto, la aventura y espectacularidad de títulos estilo Uncharted y los combates y profundidad de juegos estilo Dark Souks.
Salvando las distancias entre todos estos juegos, cogiendo de aquí y de allá y dejando por el camino muchas de sus características, Respawn ha creado su propio juego, una base fantástica para iniciar una franquicia propia. Además, lo hace con una historia interesante y unos personajes, nuevos en el universo Star Wars, que cumplen bien para comenzar a cogerles cariño. Aunque es cierto que no son tan carismáticos como los que de las películas o series de TV.
Retomando la historia de Star Wars tras todo lo ocurrido en el Episodio III: La Venganza de los Sith, el juego nos coloca tras la famosa Orden 66, cuando se supone que todos los jedis han sido eliminados de la galaxia. Ya sabíamos que un tal Obi-Wan había huido de la purga, llevando consigo a dos bebés gemelos con un convulso destino, pero también intuíamos que no todos los jedis fueron eliminados. Que la galaxia es muy grande.
Así, esta nueva historia nos coloca en la piel de Kal Kestis, un joven jedi (poco más que un padawan cuando se pone en marcha la Orden 66) que tuvo que desaparecer y ocultarse en un lejano planeta-vertedero, ocultándose como un simple chatarrero que se gana la vida recuperando piezas de naves que se puedan vender. Kal Kestis es un perdedor, un renegado, que forjará su propio destino en esta nueva historia que ya veremos cómo encaja en el canon. De momento, y sin spoilers de por medio, os diremos que no se cruza con personajes demasiado importantes en la saga Skywalker, por lo que construir una historia propia dentro del universo Star Wars, sin meterse en líos, será relativamente sencillo para Respawn.
Aun alejada de la historia de la familia Skywalker, la historia de este joven jedi resulta apasionante y está muy bien contada. Sin desvelar mucho más, diremos que nos ha enganchado una historia que, al principio es de huida y puesta a salvo pero que irá derivando en una búsqueda personal y de restauración de la mismísima Orden Jedi, en el germen de la formación de la resistencia al Imperio. Kal Kestis estará acompañado de un puñado de secundarios interesantes, a bordo de la Mantis, una nave que nos servirá de cuartel general y que nos llevará a la media docena de planetas que podremos visitar en el juego para hacer avanzar la historia.
Entre los secundarios, sin duda el mejor es BD-1, el pequeño droide que llevaremos siempre con nosotros. Uno de los puntos fuertes de los diseñadores de Star Wars, en todas sus variantes, son sin duda los droides y el pequeño BD-1 ya se ha colado en nuestros corazones, a la altura de BB-8 o R2-D2. Este pequeño robot viajará sobre nuestros hombros y nos ayudará en muchas tareas durante el juego. Un elemento narrativo genial.
Uno de los puntos fuertes del juego son sus combates. Al contrario de lo que marcaba la tradición de títulos de acción de Star Wars, aquí no vale con aporrear botones o aprenderse dos golpes de sable y un combo resultón para eliminar a la totalidad de enemigos que se nos pongan por delante. Nada de eso, Jedi Fallen Order es un título muy exigente y, como ya se ha dicho, tiene un sistema de combate con un árbol de habilidades asociado muy al estilo ‘Dark Souls’. Aquí, además de aprender nuevas habilidades que nos harán mejores en las batallas, la clave es cubrirse todo el rato, saber repeler cada ataque y conseguir deshacer las guardias de los enemigos para acabar con ellos. Son combates muy tácticos y no hay que relajarse porque un par de stormtroopers rasos pueden acabar con nosotros si se coordinan para atacarnos.
Pero claro, el uso del sable laser en un montón de combinaciones y coreografías y el uso de la Fuerza, hace que las habilidades y combos que aprendamos resulten espectaculares y útiles. Pero, en serio, no te fíes, que al final cubrirse y medir muy bien a los enemigos para irlos eliminando a tiempo, serán la clave de todo. A la dificultad bastante alta se le suma la escasez de cargas de curación, que nos facilita BD-1 cuando se lo pidamos. Es un título diseñado para morir muchas veces, por lo que se han colocado diferentes ‘puntos de meditación’ en cada mapa, en los que podemos guardar la partida. Pero, eso sí, piensa que si los utilizas recuperarás la salud, pero los enemigos abatidos se regeneran. Por eso siempre tendrás qué medir qué prefieres en cada caso.
En estos puntos de meditación, donde se grabará la partida, es donde tendremos acceso también al árbol de habilidades, donde podremos gastar los puntos que obtengamos logrando objetivos y aprendiendo nuevos elementos del universo y la historia, a cambio de nuevas habilidades que nos convertirán en un jedi más poderoso.
Además de estos puntos de guardado y reinicio del nivel, los escenarios están llenos de atajos que podremos desbloquear y que luego nos vendrán bien si morimos y tenemos que volver a empezar bastante más atrás. Todo está pensado para que, aunque el título sea exigente, no resulte insoportable. El juego va dando ayudas y atajos para no terminar con nuestros nervios, aunque tengamos que revivir 5 veces para pasar un nivel. Por supuesto, el título cuenta con cuatro niveles de dificultad que puedes ajustar dependiendo de tu experiencia o forma de jugar.
Además, los distintos planetas del juego están cargados de lugares a los que o podremos acceder en una primera visita, pero que sí podremos ver más adelante cuando hayamos adquirido alguna nueva habilidad. Esto hace que tengamos que viajar de ida y vuelta varias veces entre los distintos planetas para hacer correr la historia y para desbloquear líneas secundarias y lugares escondidos. Eso sí, cada vez que volvemos a un planeta, los enemigos se regeneran y volverán a estar allí. Hay ocultos coleccionables y mejoras, como aspectos estéticos para nuestro personaje o piezas para modificar nuestra espada láser, uno de los elementos más chulos del juego.
Además de los combates, que son el corazón del juego y que resultan épicos en batallas contra decenas de enemigos a la vez o cuando nos enfrentamos a los jefes finales, el juego tiene una gran parte de exploración y muchos puzles, que recuerdan un poco a la saga Uncharted o a Tomb Raider. Algunos puzles son gigantes y nos obligan a interactuar con el escenario y aquí BD-1 podrá darnos pistas y ayudarnos a resolverlos.
En cuanto a nivel técnico, gráficamente es una pasada y el audio también acompaña con una maravillosa banda sonora y unas fantásticas voces dobladas al castellano.
En resumen, estamos probablemente ante el mejor juego de Star Wars de esta generación de videoconsolas, lo cual es decir mucho. Una mezcla interesante de géneros, unido a su inconfundible sabor Star Wars, hará las delicias de los fans de la saga. Y resulta un reto interesante, incluso aunque por tu modo de jugar prefieras los niveles de dificultad más bajos. Y la historia te mantendrá enganchado hasta le final. ¿Será el inicio de una prometedora saga de juegos? Esperamos que sí.