{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Quedan a penas un par de semanas para la llegada de PlayStation 5 y hoy se ha levantado el embargo para que podamos publicar nuestras impresiones sobre la consola de nueva generación de Sony, que podéis leer aquí mismo. También, podemos hablaros de algunos de los juegos exclusivos y uno de ellos es un título muy especial: Astro’s Playroom. Un juego de plataformas que viene instalado en todas las PS5 y que supone la mejor bienvenida a la nueva máquina.
Cuando Sony presentó Astro’s Playroom en uno de sus eventos para anunciar PS5 y sus juegos hace unos meses, pensamos que simplemente se trataría de una pequeña demo técnica, una especie de tutorial muy trabajado que nos enseñaría las nuevas funcionalidades de la consola y su nuevo mando, el DualSense. Y, a grandes rasgos, es cierto que se trata de un fabuloso tutorial, pero es mucho más. Se trata de un juego de plataformas con todas las letras, con mucho que ofrecer a los fans y con una extensión interesante. No es muy largo, es cierto, pero sí lo suficiente para que podamos considerarlo un juego en sí mismo. Y por eso, lo vamos a analizar y contarte todo lo que ofrece.
Astro, el simpático personaje de Sony que nos presentó su tecnología de Realidad Virtual en PS4, será el encargado de protagonizar esta original bienvenida a la nueva consola. Astro’s Playroom podría considerarse una secuela del genial Astro Bot: Rescue Mission, el fabuloso título exclusivo de PlayStation VR. Como ya hemos dicho, el título viene instalado en PS5 y está pensado para que sea el primer título que iniciemos cuando hayamos instalado y configurado la consola en nuestro TV.
Así, acompañaremos a Astro a un fantástico viaje al interior de la propia PlayStation 5, cuyos componentes de alta tecnología tienen vida propia y están plagados de pequeños robots como Astro, que están organizando fiestas o rodando épicas escenas para los videojuegos más icónicos de la marca. Pero también hay algunos bugs y códigos maliciosos de poca importancia, pero a los que nos tendremos que enfrentar para superar la aventura y descubrir todos los secretos de PS5.
El juego es un plataformas 3D muy atractivo que nos anima a superar distintas fases con las habilidades de Astro. El pequeño robot, en un principio, puede moverse y saltar entre plataformas, además de golpear con sus pequeños brazos y, si pulsamos de nuevo al botón de salto en el aire, se activarán un par de láser que le otorgan un nuevo impulso para mantenerse en el aire un tiempo más. Esto nos servirá para alcanzar plataformas más altas o alejadas, además de romper algunos materiales o eliminar a algunos enemigos con los láseres que nos dan impulso.
Pero esto es solo el principio, porque los distintos escenarios que tendremos que recorrer y descubrir nos deparará muchas sorpresas, nuevas habilidades para Astro, nuevas mecánicas y un sinfín de nuevas formas de jugar. Y todo con el objetivo de desbloquear todos los secretos de esta PS5 en la que estamos inmersos, recoger un montón de monedas y, sobre todo, acumular un montón de originales coleccionables.
La plaza CPU es el corazón del sistema y del juego y desde aquí tendremos acceso a cuatro grandes zonas diferenciadas para desbloquear y completar. Cuatro grandes zonas cargadas de plataformas, muy distintas, y que están inspiradas en los componentes diferenciadores de la consola de nueva generación de Sony. Los enormes ventiladores de refrigeración de la máquina dan acceso a la zona Aguas Refrescantes que alterna divertidas playas llenas de retos, además de zonas congeladas por el frio del sistema de ventilación pobladas por pingüinos y zonas nevadas. La GPU, el corazón gráfico de la consola, nos da acceso a la zona Jungla GPU, donde nos encontramos con una detallada selva que brilla con una gran resolución. El dispositivo de almacenamiento SSD nos da acceso a la Autopista SSD, una zona donde la velocidad es la clave. Y la memoria de la PS5 nos da acceso a la Vega de la Memoria, un lugar cargado de desafíos eléctricos.
El nuevo DualSense de PlayStation 5 es mucho más que la evolución del DualShock 4, ya que incluye un montón de nuevas funcionalidades que los desarrolladores pueden utilizar para añadir como mecánicas a sus videojuegos. Y, como no hay mejor explicación que un buen ejemplo, los chicos del Team ASOBI han querido desplegar casi todo lo que se puede hacer con el mando en su juego de plataformas. Así, en todos y cada uno de los niveles de Astro’s Playroom nos encontraremos con nuevas mecánicas gracias al nuevo controlador.
Por ejemplo, vamos a encontrar muchas fases en las que los gatillos adaptativos del mando serán los verdaderos protagonistas. Esta nueva funcionalidad hace que los gatillos puedan ofrecer resistencia y responder según la fuerza que empleemos para presionarlos. Aquí, por ejemplo, los usamos para activar los dos motores de un traje de propulsión que se colocará Astro. Podremos graduar la intensidad de la potencia de cada motor apretando suavemente cada gatillo, que vibrará de manera independiente con la combustión. Esto nos permitirá sortear con precisión los obstáculos de estas fases de vuelo.
Otro elemento es el panel táctil del DualSense, que la aventura utilizará de diversas formas, como cuando dibujamos sobre él los movimientos de una bola (en la que se ha convertido Astro) para superar distintas fases de plataformas y hasta de un divertido pinball o cuando lo utilizamos para tensar los tirachinas donde se subirá nuestro pequeño héroe para saltar grandes distancias. El sensor de movimiento del mando también nos servirá para dirigir a Astro en muchas fases de plataformas o en las fases de vuelo cuando se monta en un ala-delta en la veloz fase de la Autopista SSD.
Este sensor de movimiento, unido al acelerómetro y a la increíble nueva vibración por zonas del mando y su tecnología háptica consigue transmitirnos sensaciones increíbles durante todo el juego, haciéndonos notar los pequeños golpecitos de los pasos de Astro, o cualquier golpe o vibración que se produzca en el suelo junto a nuestro protagonista. Por ejemplo, el título juega con la sensación de que el mando se nos ha llenado de pequeños Astros y nos anima a agitarlo y notar como todos esos pequeños robots rebotan en su interior siguiendo nuestros movimientos. ¡La sensación es increíblemente realista!
Por último, también el micrófono externo que incorpora el mando en su parte frontal se utiliza en muchas ocasiones, sobre todo para soplar y hacer girar mecanismos o hinchar velas, por ejemplo. Todo un catálogo de demostraciones de lo que el increíble DualSense es capaz de hacer para añadir alucinantes mecánicas a los juegos, pero también para hacernos sentir los juegos de manera física en nuestras manos.
Astro’s Playroom es una aventura de plataformas muy divertida y muy bien diseñada, pero tampoco esperes un juego muy largo. Sus cuatro zonas pueden superarse en un par de horas, añadiendo una zona extra que se desbloquea al final y que te dará acceso a un alucinante jefe final, que tendrás que intentar derrotar para ver los créditos finales del juego, que merecen mucho la pena y que te otorgarán cuantiosas recompensas. Pero, sobre todo, porque ese final es una carta de amor a PlayStation, su historia y su comunidad de seguidores, como lo es el resto del juego.
Y es que toda la aventura, además de querer mostrarnos toda la nueva tecnología de la nueva PS5 y su mando de control, es un viaje al pasado para repasar toda la historia de PlayStation. Así, cada una de las cuatro fases está dedicada también a las cuatro anteriores videoconsolas de Sony. En ellas encontraremos referencias a sus momentos más increíbles y a sus juegos más icónicos. Y, sobre todo, a todos y cada uno de los dispositivos tecnológicos que las acompañaron, incluyendo las diferentes versiones de las consolas de sobremesa y las portátiles.
Así, además de las cuatro grandes zonas que nos da acceso la Plaza CPU, también tenemos el llamado Playstation Lab, cuya puerta de acceso es una PlayStation Original. Allí se irán acumulando los trofeos que vayamos consiguiendo a lo largo del juego, los llamados ‘Artefactos’ que aparecerán aquí expuestos como un museo con nuestra colección personal.
Ya hemos dicho que Astro’s Playroom es un título que puedes terminar en un par de horas pero puede hacerte pasar unas cuantas horas más si quieres conseguir todos y cada uno de sus coleccionables. Cada una de las cuatro fases (y la fase secreta final) cuenta con distintos artefactos correspondientes a la historia de PlayStation que podemos conseguir para nuestra colección. Algunos de ellos están en sitios accesibles y cercanos al discurrir normal del nivel, pero otros están en sitios ocultos y a veces nos exigen desviarnos y jugarnos el tipo para conseguir lograrlos. Pero, es tan bonito tener una réplica virtual de PS One, de la Cámara de PSP o del puerto LAN de PS4, que querrás hacerte con todos cuesto lo que cueste. Y para ello, tendrás que volver a revisitar los diferentes niveles (lo bueno es que puedes volver directamente a cada uno de los cuatro subniveles de los que se compone un nivel cuando lo hayas completado la primera vez). Y el juego te indica los artefactos que te faltan por recoger en cada uno de ellos.
Además de los artefactos, los niveles también ocultan piezas de puzles que hay que recolectar. Estas piezas completan unos enormes murales dedicados a cada generación de PlayStation en las paredes del Playstation LAB. Pero, además de intentar conseguir estas piezas en cada uno de los niveles tenemos otra opción, la máquina gachapón que hay en esta divertida sala.
Con las monedas que recogemos en toda nuestra aventura podremos probar suerte en esta máquina gacha y obtener bolas sorpresa. En ellas podemos encontrar trofeos, piezas de los puzles y, aunque más rara vez, algunos artefactos. Asé que no olvides ir a gastar las monedas a la máquina cuando hayas acumulado muchas y tu colección se verá incrementada exponencialmente.
De Astro’s Playroom nada más que esperábamos una divertida demo técnica que nos mostrara todas las nuevas capacidades del mando DualSense, pero tenemos que decir que nos hemos llevado una grata sorpresa. Es cierto que no dura lo que un videojuego convencional, ya que puedes superarlo en un par de horas (aunque puedes echar el doble para conseguir todos los coleccionables y trofeos), pero tiene una duración decente para que lo consideremos un juego completo. Y un juego completo excelentemente diseñado, un plataformas 3D variado y muy divertido. Y con algunas fases muy exigentes.
Pero lo mejor de todo es el bonito homenaje que el juego hace a toda la historia de PlayStation. Si eres fan de la marca y sus consolas desde hace décadas, se te va a saltar alguna lagrimilla con todos y cada uno de los guiños y referencias a momentos míticos de la historia de la consola. Y, como estamos hablando de un juego gratuito que viene incluido en PS5, solo podemos decir que se trata un auténtico regalo de los desarrolladores de Sony para los nuevos usuarios de la consola de nueva generación.