Es una de las noticias de la semana. Palma de Mallorca, siete de octubre, dos y diez de la mañana en un local con categoría de bar restaurante en el que se sirven copas, cuenta con DJ y, por lo que vemos en imágenes como estas, la mayoría de sus clientes pasan de la mascarilla en mitad de las restricciones.
¿Por qué se ha hecho noticia este local? Porque la presidenta de Baleares, Francesca Lluc Armengol Socías, se encontraba en el bar tiempo después de la hora establecida de cierre cuando una patrulla de la policía local se acercaba hasta allí para denunciar la situación. Tal y como atestigua el informe oficial, el dueño del local aseguraba a los agentes que el establecimiento seguía abierto a las 02.10 de la madrugada (pese a ser la 01.00 la hora límite) porque dentro se encontraba “una autoridad”.
Al parecer, la presidenta estuvo allí hasta las 01.40 horas y, aunque se ha intentado tapar que Armengol se haya saltado sus propias normas, lo cierto es que el informe policial no deja lugar a dudas. Sin embargo, este programa ha podido saber que dicho informe “se ha extraviado”, algo que explicaría el cambio de versión ofrecido por el gobierno balear:
“Alrededor de la una de la madrugada la presidenta y sus acompañantes abandonaron el establecimiento (…) En el momento de salir, el Director general de Comunicación sufrió un desmayo producido por la medicación que recibía desde aquella misma semana por ansiedad laboral (…) Su desmayo hizo que los tres continuasen en la calle, a pocos metros del domicilio de la presidenta”.