¿Eran legales los contratos que Nacho Cano tenía con algunos de sus becarios?: la respuesta, en 'TEM'

La Policía Nacional ha remitido ya a los juzgados de Plaza de Castilla de Madrid su atestado sobre el artista musical Nacho Cano y sus acusaciones de tener a su disposición a una decena de trabajadores inmigrantes en situación irregular. Tras su detención, el exintegrante de Mecano denunciaba estar siendo víctima de un complot policial y dejaba algunas declaraciones un tanto polémicas. Pues bien, este miércoles, en 'TEM' ha estado un inspector de trabajo para aclarar todas las dudas sobre los contratos que tenía Nacho Cano con algunos de sus becarios.

Saturnino Martínez, inspector de trabajo y miembro de Unión Progresista de Inspectores de Trabajo, ha querido en primer lugar "diferenciar una relación laboral común y otras figuras que no recoge el estatuto de los trabajadores como relación laboral común, como pueden ser becarios, estudios de postgrado...". En el caso de que sea una relación laboral común, "la única posibilidad de traerse a personas que no sean miembro de la UE tiene que ser mediante la solicitud de la correspondiente autorización administrativa para residir y trabajar en España".

Y es que todo parece indicar que, concretando en el tema de Nacho Cano y como bien matizaba Marta Flich, se dice que "es una beca que se da desde la Casa de México con una empresa privada de Nacho Cano". La presentadora le preguntaba al inspector de trabajo si esta práctica es habitual. "Todo esto tiene su propia regulación y límites temporales. Estos permisos de residencia para optar a becas se suelen limitar a una duración de uno o dos años, siempre limitado a esos estudios", asegura Saturnino.

"Si hablamos de beca, todo es más difuso..."

"Una cosa es ser becario y otra tener un contrato de trabajo en prácticas. Lo fundamental es discernir, en primer lugar, si se trata de una práctica no laboral o si se trata de un contrato de trabajo en prácticas. Por lo tanto, lo principal es diferenciar entre una beca y un contrato de trabajo", añade el inspector de trabajo.

Según 'El País', los becarios trabajaban diez horas durante seis días de lunes a sábado y para obtener un poco más de dinero, hasta ponían copas en el bar que tenían en el espectáculo del musical. "Si fuese un contrato de trabajo, se ha de regular por el estatuto o convenios colectivos. Si hablamos de beca, todo es más difuso", apunta Saturnino.