321. Ese es el número total de puntos del carné de conducir que ha perdido un joven conductor en Valencia. El motivo: una trampa para librar a cerca de 100 motoristas de multas de tráfico.
El infractor tenía el permiso retirado. Además, carecía de permiso para conducir motos. Únicamente poseía el de coche, y caducado. Ahora la Guardia Civil investiga a los 91 motoristas beneficiados y se pregunta por qué motivo no saltaron las alarmas en la DGT.
Residente en Valencia, asumía las infracciones de otros conductores como propias como fuente de negocio. Entre ellas, conducir con el teléfono móvil o duplicar la velocidad permitida.
Cuando cualquiera de esos conductores era multado, contactaba directamente con el falso infractor. Este se hacía cargo de la multa asumiendo así la pérdida de puntos a cambio de una cantidad de entre 75 y 200 euros por cada punto cedido.
Conociendo el precio que tenía fijado y los puntos que habría perdido por este negocio, calculamos que habría recibido un total de más de 64.000 euros. Sus servicios se habrían extendido por hasta 15 comunidades autónomas.