Antonio, un periodista jubilado y escritor madrileño, es el siguiente soltero en acudir al restaurante del amor para tener una segunda oportunidad y llegar a enamorarse de una persona con la que compartir el resto de sus días. Es una persona que adora su profesión, Tanto es así, que asegura a las cámaras de ‘First Dates’ que un periodista no se jubila “nunca”.
Aunque Antonio siga amando su profesión como nunca y cuente a Laura Boado que se jubilará una vez muera, el soltero ha acudido al restaurante de ‘First Dates’ para ver si consigue encontrar a alguien con quien mantener una relación “estable”: “Una mujer con un nivel cultural muy similar al mío. Con la que pueda hablar de prácticamente casi todo, menos de política, porque la detesto”.
Laura Boado, en cuanto escucha todo lo que necesita Antonio para volver a ilusionarse con el amor, se dirige a la entrada del restaurante para dar la bienvenida a Sagrario, quien será la cita del periodista soltero. Es una funcionaria de Madrid que lleva prácticamente toda su vida encontrando a la persona indicada con la que poder enamorarse de verdad, puesto que solamente ha podido tener “un par” de relaciones cortas.
Nada más verse por primera vez, el soltero se lleva un chasco al descubrir que la mujer con la que le han emparejado no se ha presentado de una forma más cercana: “Esperaba un gesto por parte de ella. O bien darme la mano o darme dos besos. Ha sido un poco frío”. Sin embargo, también la ha considerado como una persona “bastante atractiva”.
Una vez comienzan a cenar, es el momento perfecto para que Antonio y Sagrario encuentren sus puntos en común, remonten esa presentación un tanto fría y dejen sus corazones libres para ver si consiguen enamorarse.
A medida que avanza la cena, parece que Antonio ya ha olvidado la presentación tan fría que ha tenido con Sagrario en cuanto descubre que comparte muchas aficiones con él: “Me parece muy bien porque yo también tengo muchas inquietudes de acudir a exposiciones cuando puedo”. Parece que la llama del amor está más intenso que nunca entre ellos.
Una vez terminan de cenar, se dirigen a las cámaras del programa para dar su veredicto final y ver si realmente han conseguido conectar tan bien como lo habían hecho durante toda la cena. Antonio es el primero en dar su veredicto sobre la mujer con la que le han emparejado: “Me gustaría tener una segunda cita porque tenemos que profundizar en ciertos temas. Creo que eres una persona franca, sincera y que realmente dice lo que piensa”.
Sagrario también estaría encantada en mantener una segunda cita con Antonio: “Sí me gustaría tener una segunda cita para seguirnos conociendo y, si esto sigue encajando, conocerse más para ver dónde va a ir esta relación”.