El caso sobre la filtración de los datos personales del novio de Ayuso vuelve a la actualidad. El Tribunal Supremo ha llamado a declarar como testigo a Miguel Ángel Rodríguez, el jefe de gabinete del PP en Madrid, por haber sido el primero en filtrar a los medios que el novio de Ayuso habría negociado un pacto con la Fiscalía.
Este tema se comentaba en el plató de 'En boca de todos' y provocaba un cruce de reproches entre Antonio Naranjo, Sarah Santaolalla y Rebeca Marín.
La periodista, Sarah Santaolalla, confirmaba que Miguel Ángel Rodríguez, "trabaja para un defraudador confeso" y es el que filtra los correos de González Amador, pero solo la parte que beneficia al novio de Ayuso y que demuestra que trabajaba para la familia de la presidenta de la Comunidad de Madrid.
Ante estas palabras, Antonio Naranjo recalcaba y comparaba las diferencias de llamar a declarar al jefe de gabinete del PP frente al Fiscal General del Estado: "El Fiscal tiene una obligación legal juega por instrucciones de la Moncloa con información que tiene obligación de guardar y que filtra con la idea de derrumbar a un rival político, no con de buscar la justicia con un defraudador de Hacienda".
Después de las declaraciones de Naranjo, la periodista Rebeca Marín salía en defensa del Fiscal General y señalaba que aún no está demostrada su implicación: "No está comprobado que haya sido el Fiscal el que haya filtrado el famoso correo de la pareja de Ayuso. Naranjo dejemos de engañar a la audiencia".
El periodista respondía al 'ataque' de Rebeca Marín y afirmaba: "Me tapo si queréis los ojos para repetir lo que decís, pero no es verdad". En ese momento, Sarah Santaolalla añadía al comentario de Antonio Naranjo: "Tápate la boca para no decir mentiras". Después de estas acusaciones a Antonio Naranjo de mentir, el periodista estallaba: "Me han dicho las dos que miento y a mí nadie me dice que miento".