La minuciosa recreación de La Alhambra elaborada en un pueblo de La Mancha que impresiona a Calleja: “He ido 500 veces a Granada”
José es un vecino de Villanueva de la Fuente que lleva más de veinte años recreando La Alhambra de Granada
El carpintero y restaurador enseña la joya arquitectónica a Jesús Calleja, que se queda maravillado
La historia de Jesús, el joven maquillador de Ciudad Real galardonado por ‘La sociedad de la nieve’, que fascina a Calleja
El equipo de ‘Volando Voy’, con Jesús Calleja al mando, se traslada hasta el entorno de Las Lagunas de Ruidera en Ciudad Real. En Villanueva de la Fuente, el presentador descubre una joya arquitectónica elaborada por José, un vecino apasionado por la carpintería que lleva más de veinte años recreando La Alhambra.
Las Lagunas de Ruidera en Ciudad Real habían fascinado a Calleja desde pequeño, según confiesa el presentador en la ceremonia de estreno del programa junto a los vecinos de las localidades de la zona.
Más
- Mercedes Milá desvela el truco para las entrevistas que le enseñó Miguel Ríos: "Lo hace antes de salir a un concierto"
- Juan Carlos cuenta cómo ser actor de teatro le hizo superar el momento más difícil de su vida: "No tenía ganas de nada"
- Yumiko, la bailarina nipona que hace diseños de ballet en Cazalla de la Sierra: ha hecho maillots a Madonna y Natalie Portmanm, entre otros
En Villanueva de la Fuente, Jesús Calleja se queda impresionado al visitar la obra de José, un vecino que lleva 22 años recreando La Alhambra. La estética está cuidada al detalle, desde el patio hasta el baño, todas las estancias mantienen el estilo del conjunto monumental granaíno.
Calleja entrevista a José en el interior de la vivienda, quien le transmite su pasión por la carpintería y la restauración, y confiesa que muchos de los cursos que ha realizado han sido precisamente en la provincia natal del presentador, León.
En el estreno de ‘Volando Voy’ junto al resto de vecinos de la zona de Las Lagunas de Ruidera, José confiesa que ha visitado La Alhambra más de 500 veces. El carpintero calcula que finalizará su obra en unos diez años y que será la de su jubilación.
