El brutal crimen de una educadora social en Badajoz ha puesto sobre la mesa un intenso debate y reivindicación que llevan años denunciando desde el colectivo. Muchos empleados han temido por su vida. Belén fue asesinada el pasado domingo por tres menores de entre 14 y 15 años. Se encontraba sola en un piso tutelado en el que existía una única llave.
Fuentes policiales contactadas por 'Código 10' aseguran que el móvil del crimen habría sido precisamente ese, el de la necesidad de huida de los menores. Así lo ha relatado Nacho Abad, que explica que golpearon y estrangularon a la mujer con la intención de llevarse la llave, objetivo que terminaron consiguiendo.
Laura García Honrubia es educadora social y sabe muy bien el peligro que corren los profesionales de este sector. Ha relatado en directo una dura vivencia con la que ha manifestado la falta de protocolos a la hora de hacer su trabajo. "Me han señalado con un cuchillo", dice. Según cuenta, un menor estaba intentando "ahorcarse con un cinturón" en el piso tutelado en el que trabajaba. Tras ello, intentó ayudar y mediar para evitar que se fuese agravando el asunto.
La empleada, en baja en estos momentos, relata que acudió al hospital con él tras sentirse amenazada. La dura vivencia puso un antes y un después en su carrera, ya que decidió denunciar y pedir recursos para evitar que le volviese a suceder algo así. "Te llaman loca cuando denuncias. Yo pedía un 'walkie talkie', el botón del pánico o estar acompañada", asegura.
'Hay recortes' es una de las frases que más ha escuchado Laura, que está convencida de que ha tenido que suceder un asesinato de este calibre para que se ponga de manifiesta la falta de protección. "Nos vamos a la calle quienes hemos reivindicado", subraya.
Nacho Abad ha desvelado una de las hipótesis con las que la policía trabaja en estos momentos para esclarecer el origen del crimen de la educadora social de 35 años que fue asesinada a manos de 3 menores en un piso tutelado de Badajoz.
David Collantes trabajó como vigilante de seguridad en el centro de menores en el que fue empleada Belén. Ha relatado a 'Código 10' algunas agresiones que sufrió por parte de los internos. En una ocasión, según dice, le "llegaron a partir la tibia y el peroné".