Cristina denuncia en 'Código 10' la negligencia médica por la que le queda muy poco de vida: "Me dijeron que no había rastro del cáncer"

Cristina sabe que le queda muy poco tiempo de vida. Lo mismo semanas, meses, o incluso días. Una negligencia médica podría estar detrás del diagnóstico tardío que recibió del cáncer de pulmón que padece. Este martes, lo ha denunciado en directo en 'Código 10'.

"Estoy aquí pero no sé si mañana voy a estar o no", dice.

En 2020 le detectan un cáncer de útero. Le dicen que tiene metástasis y que la van a intentar curar. Cristina, que en aquél momento tenía 34 años, se somete a dos operaciones para sacarle los ganglios. "Me empiezan a dar quimioterapia, radioterapia y todo a la vez", relata.

Tres años después, le dicen que está totalmente curada. Incluso toca la campana en el Hospital Universitario Virgen de la Victoria (El Clínico), donde fue tratada. Pero a partir de ahí empieza la verdadera tragedia para la mujer.

En verano de 2023 empieza a notar algo raro. Tiene mucha fiebre, tos e incluso expulsa sangre. La oncóloga de la seguridad social le dice que es consecuencia del tratamiento recibido por el cáncer anterior.

"Me decían que no había rastro del cáncer"

Un día, Cristina decide acudir a urgencias para que le hagan un tac. Se niegan a hacérselo y le dicen que tiene neumonía. "Yo me quejaba del dolor de espalda y me decían que no había rastro de cáncer", denuncia. Así que tras esa mala experiencia se traslada a otro médico de pago junto a su pareja para que sigan analizándole. Y es ahí donde comprueban que tiene un cáncer de pulmón bastante extendido. "Me dicen que son dos tumores, que fuera corriendo al oncólogo de Málaga. Fui a pedir explicaciones y me volví con mucha rabia", ha compartido ante Nacho Abad y David Alemán.

La reúnen en el hospital donde no se lo detectaron para "pedirle perdón"

Desde que le detectan ese tumor maligno pasan muchos meses. Por eso, está convencida de que el tiempo hubiera sido clave en su posible cura, ya que en marzo del 2024 no le auguraron un buen pronóstico de la dura enfermedad. "No me explico haberme quitado los ganglios y que no me hubiesen mirado más arriba", detalla.

El jefe de oncología del centro hospitalario donde era atendida antes de acudir al médico de pago reunió a Cristina un día para disculparse. "Me perdonan, me dicen que que ha habido negligencia, que no saben lo que ha pasado. Ahí se olvidaron de mí", concluye.

Temas