Un centenar de manifestantes impiden que devuelvan unas vacas al dueño que las tenía desnutridas en Cantabria
Las cinco vacas tienen que ser devueltas a su anterior dueño por una orden judicial
Las vacas llegaron al refugio de La Manada Cántabra hace tres años con signos de maltrato animal
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Mas de 150 personas de toda España se concentraron el pasado 15 de enero a las puertas de un refugio de animales en Oruña de Piélagos, Cantabria. Los manifestantes lograron echar a numerosos agentes del SEPRONA cuando intentaban llevarse a través de una orden judicial a cinco vacas para ser devueltas a su dueño, un ganadero que las maltrataba. Según informa Maialen Larrinaga en el video, el dueño de las vacas ha admitido que si los animales vuelven con él, seguramente acaben en el matadero.
El SEPRONA acudía la mañana del miércoles al refugio animal de La Manada Cántabra con un camión preparado para trasladar a los animales cuando se vieron sorprendidos por una multitudinaria concentración. Los agentes llegaron con el objetivo de devolver cinco vacas al dueño de estas bajo una orden judicial expedida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Medio Cudeyo.
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Los manifestantes protestaban al grito de "derechos ya para los animales"
Más de 150 personas y representantes de santuarios de todo el país se manifestaron en contra de la orden a gritos de “derechos ya para los animales” y “los animales sienten”. Las vacas llevan tres años en el refugio cántabro tras ser decomisadas por el propio SEPRONA al presentar indicios de maltrato animal.
Los animales llegaron al santuario prácticamente al borde de la muerte. Las vacas se encontraban desnutridas y con las costillas asomándose. Con su anterior ganadero vivían en unas condiciones lamentables: sin agua, sin luz y encadenadas. Gracias a las labores de los voluntarios del refugio, los animales han engordado alrededor de 200 kilos y se encuentran en perfecto estado.
El traslado de las vacas se encuentra paralizado
Tras la movilización, el SEPRONA informaba al juzgado sobre la imposibilidad de trasportar a los animales. Por ahora, el traslado ha quedado paralizado, pero la responsable del refugio, Patricia López, ha anunciado que la lucha continúa: "De momento se ha parado, pero tenemos que seguir aquí porque vendrán, porque es una orden judicial".
El santuario cántabro ha reclamado por vía extrajudicial 150.000 euros al ganadero por la manutención de las vacas desde 2022. El refugio también ha anunciado que recurrirá a la vía administrativa después de que el juzgado haya estimado que no hay un delito penal de maltrato animal.
El ganadero declaraba que las vacas seguramente terminen yendo al matadero
Los representantes de otros santuarios han calificado el suceso como un “pequeño logro”, pero "victoria será cuando la justicia, de verdad, defienda lo que ya las autoridades han dicho, que estas vacas son víctimas del maltrato y del sufrimiento animal. Y si lo ve SEPRONA, si lo ve el Ayuntamiento y la Guardia Civil, la justicia no puede posicionarse en contra después de tres años".
Por el momento, el refugio de La Manada Cántabra se encuentra en alerta por si vuelven los agentes. El dueño de las vacas se ha pronunciado al respecto y ha asegurado que si recupera a los animales, acabará seguramente por llevarlos al matadero.
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