Un aparente accidente de tráfico se ha convertido en un grave asesinato de violencia de género. Un hombre sorprendía a su pareja con el coche, se paraba, se acercaba al coche y le asestaba varias puñaladas a la mujer delante de su hija, que se encontraba sentada en la parte de atrás del vehículo.
Todo comienza cuando una persona llama a emergencias avisando de una colisión entre dos coches, el conductor de uno de ellos ha escapado, pero la policía da con él y confiesa: "He sido yo, la he matado". En ese momento no saben a qué se refieren, pero cuando inspeccionan el otro vehículo se encuentran una escena infernal, una mujer cosida a puñaladas y detrás, su hija.
El hombre acusado de este asesinato, no es la primera vez que tiene problemas con la justicia, ha estado en la cárcel por una brutal paliza en grupo a un portero de discoteca hace unos años.
El programa lograba entrevistar a dos testigos que son vecinos de ese barrio de siempre y Andrés confesaba que vio la cara de felicidad de este hombre: "Se asomaba y hacía movimientos con la cabeza, se le veía tranquilo y nos miraba".
Así mismo, este testigo desvelaba, que el asesino estuvo dentro del coche de la policía y protegido por ellos porque los vecinos le querían matar después de lo que había hecho: "La policía lo tuvo que esconder porque la gente quería atacarle".
Por otro lado, Andrés, otro de los testigos que relataba: "Yo cuando llego, él ya estaba detenido y estaba con la científica. La niña y la mujer ya no estaban porque se las habían llevado los servicios de emergencia".