La estafa de las imágenes del antes y el después de las operaciones estéticas: ¿son posibles estos cambios radicales?
En numerosas ocasiones, las clínicas turcas trucan las fotografías del antes y el después para atraer pacientes
Muchas de las complicaciones del postoperatorio se dan cuando se vuelve a España
Aumenta la cirugía estética entre los hombres: ¿cuáles son las intervenciones más demandadas por ellos?
No hace falta levantar la cabeza del móviles para ver cambios radicales con cirugías estéticas detrás. Las redes sociales se inundan a diario de fotos enseñando el antes y después de muchas personas con resultados extraordinarios tras supuestamente haberse sometido a retoques estéticos. Las intervenciones son cada vez más frecuentes. En España no se puede dudar de la popularidad de estas, siendo el quinto país que mas operaciones estéticos realiza, pero poco Turquía se está colando en el ranking. ¿Son tan maravillosos estos cambios como parecen?
En los últimos años, Turquía se ha convertido en el paraíso de las cirugías. Su viralidad se debe al bajo coste de estas intervenciones y a las condiciones que ofrecen las clínicas: alojamiento y seguimiento de la operación. Otra cosa que ha incentivado el turismo estético al país asiático son los supuestos cambios radicales que realizan. Estos son publicados en redes sociales la mayoría de veces, pero no hay que fiarse siempre de lo que vemos.
MÁS
Numerosas clínicas resultan ser una farsa
Pocas veces nos damos cuenta de la estafa de algunas clínicas, pero hay que tener en cuenta que los cambios que nos venden pueden ser falsos. Los retoques fotográficos, la luz o el maquillaje son factores que cambian por completo la perspectiva. Hay que tener en cuenta que es imposible hacer magia con este tipo de intervenciones y que hay opciones que no son factibles, como regenerar la piel. Joan Fontdevila, cirujano plástico, explica en el video que "con todas las tecnologías que hay, llegar a este punto de renovar la piel" no es factible.
La popularidad de las operaciones estéticas es más que evidente. Un estudio realizado por la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS) puso en manifiesto el aumento de intervenciones de los últimos cuatro años, de un 40%, con un total de 34'9 millones de retoques. La blefaroplastia, rinoplastia, liposucción o aumento de mamas son algunas de las operaciones más demandadas, pero no hay que olvidar que todas las operaciones tienen sus riesgos.
España limita las operaciones a profesionales
Cuando estas intervenciones son realizadas en el extranjero, en numerosas ocasiones las complicaciones aparecen una vez el paciente se ha asentado en España y no tiene el seguimiento prometido por las clínicas. Esto supone un grave problema, como explica Fondevila, ya que a "la complicación que haya sufrido no se le puede dar tratamiento en el sistema público", solamente se puede "solucionar la urgencia". En algunas ocasiones, los centros clínicos tampoco tienen las condiciones más favorables, tanto en España como en el extranjero. Para garantizar la seguridad de los pacientes, el Ministerio de Sanidad este sábado publicó en el BOE un Real Decreto donde se limitaba el ejercicio de la cirugía estética a aquellos profesionales con formación específica en ello.
Cambiarse el aspecto físico no debería ser un problema, pero sí que se debe acudir a un profesional colegiado y tener mucho cuidado porque no todo es lo que parece.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.