La barbería Janoher echa el cierre tras 100 años y tres generaciones por falta de relevo

La barbería Janoher, de La Bisbal d'Empordà (Girona) abrió en 1924, con tres generaciones de peluqueros cortando el pelo y afeitando en sus sillones durante 100 años. Según informan Paula García y R. Martín en Noticias Cuatro, el negocio echa el cierre porque no tienen relevo generacional. Josep Janoher abre este 27 de agosto por última vez las puertas de su barbería. Hay varias profesiones que también sufren la falta de relevo generacional, como el oficio de zapatero, la pesca en alta mar y la hostelería.

Josep Janoher muestra una imagen en blanco y negro y explica: “Aquí fue el inicio donde empezó con el abuelo Vicens y sus operarios, y con la atenta mirada de su padre Gabriel”. El hijo de Josep Janoher, Ricard, expone: “Me llevo todo lo que son los valores y la humanidad que se respira en esos 20 metros cuadrados, y los voy a ofrecer en mi oficio que es ser médico de La Bisbal (d'Empordà) también”.

Las cosas han cambiado mucho en un siglo y por las navajas y las tijeras de la barbería Janoher han pasado muchas historias, las mejores las más humanas. Josep Janoher comenta: “Hay una mujer que cada día cuando abro pasa por aquí y le doy los buenos días. El otro día cuando se lo dije: Hola, mira, bajamos el telón. (Ella) se quedó un momento parada y dijo: Caray, ¿ahora a mí quién me dará los buenos días?”.

Josep comenzó a ayudar a su padre con 11 o 12 años y se puso al frente del negocio paulatinamente

Según recoge L’Aguait, Vicens, el abuelo de Josep Janoher, murió después de la Guerra Civil (1936-39) a causa de una enfermedad. Vicens tenía dos hijos y el mayor (Gabriel) ya había aprendido el oficio, pero como la familia no tenía dinero tuvieron que dejar el local de Les Voltes. Gabriel siguió trabajando de barbero en otros locales como segundo oficio hasta que en los años sesenta abrió la peluquería en el local actual. Josep ya ayudaba a su padre Gabriel con 11 o 12 años y cada vez adquiría más responsabilidades. Finalmente, se puso al frente del negocio paulatinamente.

Unas obras transformaron la calle en una vía sin coches y Josep pensaba que perderían el negocio. Él se quedó sorprendido al ver que sus clientes le seguían buscando a pesar de tener que dejar el coche lejos. También hay casos de tres generaciones de la misma familia que han ido siempre a cortarse el pelo con la familia de Josep, e incluso hay clientes que vienen de lejos como de California (Estados Unidos).

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.