Cada vez son más los colegios que se desapuntan de la moda de los libros digitales y vuelven a los libros de papel de toda la vida. Según informa Laura Queijeiro en Noticias Cuatro, en Galicia 21 centros abandonarán el uso del libro digital el curso que viene. Estos centros se desenganchan del programa ‘E-Dixgal’, lo que significa que el curso que viene no habrá pantallas en sus aulas.
Esta decisión se toma en medio del debate abierto por los padres de si se debe limitar el uso de las pantallas a los niños. Desde los colegios aseguran que parece que falta formación entre el profesorado y que el uso de ordenadores no ha mejorado el rendimiento escolar de los alumnos. Hay padres que dicen haber detectado que no se ha variado demasiado la metodología de enseñanza con su uso, y que se ha trasladado al ordenador lo que antes leían en el papel.
María José Ferreño, presidenta de la Federación Provincial de Ampas de Centros Públicos, comenta: “Los niños trabajando con una pantalla no hacen esquemas, no utilizan otros sistemas de trabajo que van a necesitar en la vida. Tienen que saber leer un contrato laboral, saber defenderse en un banco. Hay muchas cosas que sí que están aprendiendo, pero que no sea exclusivo a una pantalla todas las horas del día”.
Ni las administraciones públicas ni los expertos tienen dudas ya de la necesidad de incorporar las nuevas tecnologías a la educación. Ellos lo consideran como una “alfabetización imprescindible” si estas herramientas “son adecuadamente implementadas”, ya que los alumnos no pueden vivir sin adaptarse a la realidad actual.
En el caso de Galicia, desde hace más de una década, la mayoría de los centros forman parte del proyecto ‘Abalar’. Su objetivo es transformar el aula tradicional en una digital, lo cual implica a los docentes, a los alumnos y a las familias. La principal iniciativa del proyecto es el libro digital gratuito ‘E-Dixgal’, el cual ha sido usado por 64.200 alumnos desde 5º de Primaria a 4º de ESO, que estudian en 630 colegios e institutos.
Las cifras reflejan que el 46,1% de los estudiantes gallegos forman parte del proyecto ‘Abalar’ y que el 56,6% de los centros ya forman parte de él. ‘E-Dixgal’ aporta a cada alumno un portátil con contenidos educativos digitales para cada materia. Los alumnos pueden llevarse el ordenador a sus casas para seguir trabajando con él sin Internet. Esto último facilita el acceso para los hogares que no dispongan de conexión.
Un estudio de la Unesco, publicado en julio de 2023, no desmiente los beneficios de implantar estos avances en la enseñanza, pero sí muestra dudas de que existan “pruebas sólidas” porque “muchas” proceden de las empresas que “intentan vender la tecnología”. El informe también añade que la inmersión en estos avances debe “centrarse en los resultados del aprendizaje”, no solo “en el aporte tecnológico”.