Un hombre estaba agrediendo a su pareja en una calle de Colmenar Viejo a 100 metros del cuartel de la Guardia Civil. Los hechos fueron grabados por una cámara de seguridad y la historia no fue a más gracias a la rápida actuación de Pilar, la agente que estaba de servicio en la puerta, según informa Raquel Duva. En España, las denuncias por violencia de género han aumentado y la cifra de víctimas ha subido en un 10,3%.
El agresor se mostró nervioso y violento. “Se pensaba que no había visto nada. Ella sí me manifestó que la había pegado y que era su marido. Él intentó ir hacia ella y hacia mí y lo tuve que empujar. Le dije que se tumbase en el suelo y procedí a engrilletarle por su seguridad, la de la víctima y la mía”, explica la agente. Quedó detenido por un caso de violencia de género.
Un hombre estaba pegando a su pareja en una calle de Colmenar Viejo a 100 metros del cuartel de la Guardia Civil, situado en la avenida de la Libertad. Las cámaras de seguridad captaron el momento que ocurrió a las cinco y media de la mañana. Sin dudarlo, la agente Pilar acudió a auxiliar a la mujer: “Salí corriendo y procedí a separar al agresor de la víctima”. El agresor, de 36 años, estaba nervioso. “Tenía agresividad verbal, insultaba y amenazaba tanto a la víctima como a mí”, explica la agente de la Guardia Civil.
En las imágenes se ve cómo el hombre no depone su actitud y Pilar procede a esposarlo por seguridad. La víctima de 35 años presentaba lesiones leves y llamaron a una ambulancia. No era la primera vez que ocurría. “Le había pegado incluso en presencia de sus hijas”, explica. La mujer no quiso presentar denuncia por miedo y el agresor negó los hechos. El juez ya ha dictado medidas cautelares para proteger a la víctima.