Las viviendas turísticas suben en Vigo y ya superan la oferta de hoteles que hay en la ciudad. El boom es tan alto que ya se crean inmobiliarias tan solo para controlar este nicho de mercado. “El que se queda muchos días prefiere estar en un piso con el salón, la cocina para poder desayunar”, explica Sergio Román, gerente de ‘Cíes Hoteles y Suites’. Según informa, Laura Queijeiro, Gema García, Hildegard Romero y Sara García, los hosteleros ven competencia desleal. En zonas como Santander, los vecinos ya denuncian que quieren echarlos por culpa de este negocio.
En 2018 había unos 5.000 pisos vacacionales. Ahora hay 7.000, lo que supone 2.000 más que los alojamientos tradicionales. “Son las leyes que tienen los propietarios. Que si tuvieran una seguridad a la hora de poder alquilar, no se plantearía andar con todas estas cosas”, señala Román. Y es que las estafas vacaciones aumentan, sobre todo en los casos donde se realizan a última hora.
Levantar la persiana de un nuevo piso turístico es cada vez más habitual en Vigo. La oferta de este tipo de negocio ha crecido tanto que ya supera a la que existe de hoteles. “Si tú tienes tu licencia en tiempo y forma pues no tienes absolutamente ningún problema”, señala Cristina Fontán, de ‘Cabana inmobiliaria’. “Cumplimos las normas de la calidad y de cómo tiene que estar la vivienda. Luego cumplimos con el parte de registro de viajeros, con el fisco y con Hacienda”, sostiene Dulcinea Abuín, presidenta de ‘Aviturga’.
Los hosteleros ven en este tipo de propiedades una competencia desleal. “Un hotel da servicios, acompañamiento y una serie de garantías que esas viviendas no están dando. Garantías a nivel sanitario, de seguridad, de plan de incendios, de plagas y de control de quién está aquí”, apunta Iván Sánchez, presidente de ‘Ahosvi’. Ellos piden más inspecciones. “En Vigo, lo que estamos proponiendo es que se haga una moratoria en la concesión de viviendas”, añade Sánchez. Y es que advierten que este fenómeno les quita cada vez más clientes.