Los Mossos d’Esquadra investigan la muerte de un hombre en el Polígono de Riudellots de la Selva (Girona). Según informan Marta Aguirregomezcorta y Joel Serrano en Noticias Cuatro, la víctima era un miembro de una de las dos bandas que protagonizaron una pelea con armas de fuego en ese lugar el pasado 13 de junio. Los indicios apuntan a un ajuste de cuentas.
En un vídeo grabado por una trabajadora de la zona se puede observar cómo comenzaron a golpearse entre varias personas con palos enormes y uno de ellos se cae al suelo malherido. La principal hipótesis es que se estaban enfrentando dos posibles bandas rivales por un ajuste de cuentas relacionado con un asunto de drogas, pero no está confirmado aún.
Pero no todo quedó en eso, la reyerta continúo cuando uno de ellos disparó dos tiros y otro comenzó a golpear la luna de un coche. Una persona montada en uno de los coches parece estar esperando a una persona involucrada en la pelea para poder huir, y cuando otra persona se lo intenta impedir, le dispara desde el interior. Tras avanzar unos metros, el vehículo con matrícula francesa recoge a un hombre vestido completamente de negro.
La reyerta terminó con un hombre de 34 años muerto por un disparo y otro malherido al que ya le dieron el alta. Las dos víctimas eran hermanos y trabajaban en una de las naves del Polígono de Riudellots de la Selva, que funciona como taller mecánico y empresa de transportes de alta gama. En total son cinco las personas que han huido y la policía ha abierto un dispositivo ‘jaula’ para localizar a los implicados en esta brutal paliza.
El hombre que resultó herido fue a causa de un tiro en la pierna y un golpe con una barra de hierro. Tuvo que ser trasladado al Hospital Josep Trueta y le atendieron de urgencias, pero ya recibió el alta. El fallecido, de origen rumano, recibió un disparo en el estómago, el cual le ocasionó la muerte. Él regentaba el taller y la empresa de transporte internacional junto a su hermano y a otros familiares.
La policía baraja la hipótesis de que el cabecilla de la banda asaltante es de origen magrebí, al igual que otros miembros del grupo. Aun desconocen con exactitud el origen de la totalidad de ellos, ya que varios llevaban la cara tapada con pasamontañas. Los investigadores están tomando declaración a los numerosos testigos que vieron la pelea desde sus puestos de trabajo. Algunos de ellos llegaron a grabar lo sucedido, pero la policía también está revisando las más de 100 cámaras de seguridad del polígono.
Los agresores huyeron del lugar en dos vehículos, ambos eran unos Volkswagen Golf con matrícula francesa. El primero en abandonar la zona fue uno negro y el segundo gris, con una luna reventada y el cristal del copiloto también. Esto fue porque dispararon desde el interior para ahuyentar a los empleados del taller que atacaban el vehículo