La investigación por la muerte de dos guardias civiles en Barbate el pasado mes de enero ha dado un giro de 180 grados. Los detenidos por arrollar la embarcación de los agentes con narcolancha no son los asesinos. Según informa Isabel Sanz en el vídeo, los detenidos podrían quedar en libertad y la Guardia Civil busca a los verdaderos culpables. En Noticias Cuatro analizamos cuáles son las pruebas que han provocado este giro.
Los familiares de los detenidos gritaban su inocencia el mismo día que fueron arrestados y pedían a las autoridades que vieran los vídeos que les habían entregado. Los abogados de los detenidos ya defendieron que sus clientes no eran los que conducían la narcolancha que arrolló a los guardias civiles. Para ello se basaban en la existencia de un vídeo en el que se veía otra narcolancha con cuatro motores, como la que conducía Kiko ‘el Cabra’.
Ahora, el informe de la UCO les da la razón. Según su informe, eran otros narcos y no los detenidos los que acabaron con la vida de los dos agentes. Las defensas de los arrestados ya han pedido su inmediata puesta en libertad y, de no ser así, afirman que recurrirán a la Audiencia de Cádiz. Aseguran que el informe viene a ratificar lo que ellos llevan dos meses defendiendo: que estaban en una embarcación en el puerto de Barbate pero no en la que arrolló a los agentes. Los vídeos que ellos mismo grabaron han sido claves para exculparles.
La fiscalía, por su parte, se opone a la puesta en libertad porque siguen pesando sobre los acusados delitos graves de narcotráfico y también pertenencia a organización criminal.
Una de las claves que ha servido para descartar que los detenidos fueran los autores del asesinato de los dos guardias civiles en Barbate son los vídeos en los que se ve la narcolancha de Kiko ‘el Cabra’, la cual tiene dos antenas. Imágenes relevantes porque en la barca que impactó con los agentes y asesinó a dos de ellos solo había una antena. Esa es una de las evidencias que la UCO recoge en su último informe, tres meses después del ataque.
Además de las antenas, los agentes destacan en su informe que en la embarcación que atropella a la zodiac, hay cuatro tripulantes, vestidos de rojo, azul y verde, mientras que en la lancha de Kiko ‘el Cabra’ había seis personas.
A estas evidencias hay que sumar que los detenidos grabaron el ataque desde su propia embarcación, por lo que no podían estar lanzándose contra los agentes.
La Guardia Civil ha reconocido el error que se pudo producir porque hubo testigos que hablaban de una sola narcolancha de cuatro motores, cuando en realidad, había dos. Ahora, la Guardia Civil busca a los verdaderos autores del ataque.
Ahora la investigación tendrá que tomar otro camino. Por un lado, según explica Dani Montero en Noticias Cuatro, tenemos seis personas que están acusadas de un delito de contrabando, que ellos mismos reconocieron y que la fatídica noche estuvieron allí, pero que no son los que mataron a los dos guardias civiles.
Por otro lado, se abre una línea de investigación para saber quién iba en realidad en esa narcolancha y las informaciones que se manejan es que se trataría de un narco marroquí llamado Karim.
Para dar con este narco los investigadores cuentan con algunas pruebas. Según explica Dani Montero, hay ADN dentro de las lanchas, de la que se cogió hay cuatro perfiles que todavía no han sido identificados. Se sabe que no fue la que impactó, pero estuvieron varios días todas juntas intentando refugiarse del temporal, por lo que es normal que los narcos pasaran de unas lanchas a otras.
También hay que recordar que los detenidos quedarán libres de la acusación de asesinato, pero estuvieron allí esos días y, lo normal es que conocieran a las personas que tenían alrededor, aunque fuera de vista. Aunque, ya en las primeras declaraciones ante la jueza negaron saber quién los había contratado y no aportaron ninguna información.