Los jóvenes son unos de los más perjudicados por los altos precios de la vivienda. Pese a la iniciativa del Gobierno de poner un tope a los alquileres con la Ley de Vivienda, lo cierto es que sigue dependiendo de las Comunidades Autónomas, que son quienes tienen la competencia. La consecuencia de esto se puede ver en Valencia, donde ya tienen el doble de las reservas que el año anterior en las residencias universitarias. Miles de jóvenes no pueden permitirse ni comprar una vivienda ni alquilar por las complicaciones a las que se enfrentan, según informa en el vídeo Manu Reyes.
Las reservas de las residencias universitarias rozan a estas alturas del curso el lleno. Así está pasando en Valencia, donde los jóvenes acuden a estos lugares por los altos precios de los alquileres. “Están completas al 100% y con listas de espera. Aquí rondamos el 55%, es casi el doble de la ocupación del año pasado”, explica Lorena Larragaña, directora de Resa Patacona.
Cuatro de cada diez hogares destinan más del 40% del gasto a pagar el alquiler y los suministros de las viviendas. Es uno de los datos que muestra la vulnerabilidad y precariedad que viven los españoles. Los jóvenes, que se encuentran en su etapa formativa, siguen estudiando para ampliar sus posibilidades de encontrar un trabajo y así conseguir una vivienda digna en el futuro.
Aunque esto ya no es una certeza para ellos. Apenas el 24% de los jóvenes, de entre 15 a 24 años, tiene empleo en España, casi ocho puntos menos que la media de la Unión Europea (UE). Mientras, continúan en una situación precaria por no poder permitirse un alquiler en España mientras siguen con sus estudios. Así, muchos recurren a las residencias universitarias para poder mantenerse mientras continúan con su especialización en materia de educación.