Las lluvias y el calor dan un empujón a los espárragos: la buena cosecha genera 1.000 puestos de trabajo

  • Luz Agostina Giménez es una de las 1.000 personas que ha encontrado trabajo en una cooperativa de Granada

  • Las lluvias de la Semana Santa han hecho que se prevea un incremento en la producción del espárrago

  • David Sánchez llevaba un año en paro y gacias a la temporada del espárrago se comprará un coche

Después de una Semana Santa llena de lluvias, llega un episodio de calor extraordinario: España marca récord de temperaturas. Estos dos fenómenos atmosféricos han conseguido que haya una buena cosecha del espárrago, sobre todo en un pueblo de Granada donde viven de ello. Más de 1.000 personas han encontrado trabajo durante la campaña de este alimento, según informa en el vídeo Patricia Vázquez.

Luz Agostina Giménez es una de las 1.000 personas que ha encontrado trabajo en la Cooperativa Gallombares de Granada: "Llevaba en paro cinco meses y empecé aquí porque todo el mundo me hablaba del lugar y me aventuré. Me dieron la oportunidad porque yo no sabía hacer nada. Me han ayudado a buscar piso y un coche para venir a trabajar". Las lluvias de la Semana Santa han hecho que se prevea un incremento en la producción del espárrago.

Aumenta la producción del espárrago en Granada

Las lluvias y el calor anómalo de marzo han dado paso a una buena cosecha de los espárragos. David Sánchez llevaba un año en paro y con esta temporada del producto se podrá comprar un coche. "Estaba sin trabajo, buscando, hasta que me llamaron y vine", explica. Y es que en esta cooperativa no dejan de descargar espárragos.

"La campaña comenzó a finales de febrero. Ahora estamos ante unos tres millones de kilos. Con las altas temperaturas que se esperan, podemos llegar a alcanzar los ocho millones de kilos", apunta Ángel Delgado, comercial de la Cooperativa Gallombares. "Este año con lo que ha llovido viene estupendo. Son unos productos de buena calidad y bastante calidad", añade el agricultor Alejandro Martín. El precio que recibe el agricultor también ha mejorado: unos tres euros y medio por kilo. Una cifra bastante aceptable para este producto que se ha convertido en una de las señas de identidad de la agricultura granadina.