Este viernes 15 de marzo es el Día Internacional del Covid Persistente y ya han pasado cuatro años desde el inicio de la pandemia, pero todavía hay gente con secuelas. Son aquellos pacientes que meses y años después de contagiarse continúan con síntomas. Según informa Patricia Pereda en el vídeo, hay algunos que pasan prácticamente todo el día en casa porque sufren problemas que les impiden hacer vida normal
Los datos que ofrece la SEMG (Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia) recogen que son 2.000.000 las personas afectadas y sufren problemas como cansancio, malestar general, problemas digestivos o tos. Unos síntomas que pueden llegar a ser incapacitantes, de manera que un 10% de los afectados no puede trabajar, el 29% está de baja laboral, el 19% trabaja con limitaciones, y el 15% trabaja con normalidad.
En octubre del año pasado se creó la Red española de investigación de covid persistente (ReiCOP), cuya presidenta y la del SEMG es Pilar Rodríguez. Se inventó con la finalidad de dar visibilidad a la enfermedad y la creación de un registro nacional con la cifra real de pacientes que hayan sido diagnosticados
Lorenzo Armenteros, portavoz del SEMG, dice que no existe actualmente un tratamiento específico para esta patología. Guadalupe pasó 18 meses de baja, hasta que decidió jubilarse. Ella comenta que muchos de sus compañeros de trabajo y de otros trabajos se quedan sin trabajo después de esos 18 meses de baja.
Los pacientes de covid persistente se enfrentan a médicos de Atención Primaria que no quieren reconocer la enfermedad. Desde las asociaciones piden que se reconozca que el covid persistente es una enfermedad de origen biológico y que no se la inventan los pacientes, además de aumentar la investigación para que los pacientes de esta enfermedad no tengan que pasar todos los días sentados.
Guadalupe López tiene 65 años y es paciente de covid persistente. Ella comenta que se contagió en marzo de 2020 ya que era enfermera en Atención Primaria. Les daban una bata verde como de papel y a las tres o cuatro horas tenía que dar su bata sudada a otro compañero.
Cuenta que a ella el covid le dio muy fuerte y tuvo una neumonía bilateral, y que, tras cuatro años, los síntomas han continuado aumentando. Ha llegado a tener hasta 70 u 80 síntomas como pueden ser fuertes taquicardias, herpes, no enterarse de lo que leía, el cansancio al subir escaleras, o darse una ducha y posteriormente tener que reposar dos o tres horas para continuar con su día.
José Mendez tiene 50 años y es paciente de covid persistente desde mayo de 2021. Cuenta que forma parte de 10% de los afectados que han perdido su empleo. Añade que ha tenido multitud de síntomas como fatiga, pérdida de visión y olfato y dolores que le vienen de madrugada.
Lo más curioso del caso de José es que se está olvidando de cómo hablar inglés, cuando es un idioma que usaba profesionalmente y comenzó a “no recordar palabras”. Es un síntoma de los menos conocidos, pero se debe al daño neurocognitivo que supone que se pierda la memoria.