‘La novia que se queda en casa’ (Stay At Home Girlfriend, en inglés) es una de las tendencias de moda en TikTok. Las amas de casa del siglo XXI, que presumen de una vida idílica. Su día a día de mantenidas es deseado por sus miles de seguidores. En Noticias Cuatro analizamos cómo puede triunfar este fenómeno en plena ola de feminismo y dónde está la trampa.
“Soy mantenida y claro que me vuelvo a dormir cuando mi esposo se va a trabajar”, afirma una de las influencers que presume de vivir a costa de lo que ganan sus parejas. Son mujeres florero y se han convertido en la última moda en redes sociales. La tendencia #SAHGF, Stay At Home Girlfriend, acumula más de 165 millones de visualizaciones en TikTok.
En sus vídeos, nos muestran sus vidas idílicas como mujeres mantenidas: desayunos saludables, ver la tele, hacerse mascarillas para la piel, ejercicio para estar en forma.
Parece difícil entender cómo en plena ola de feminismo esta tendencia ha llegado a triunfar. Natalia, experta en redes sociales, nos explica que, para sus seguidores, “esas chicas son y tienen lo que yo no soy, lo que yo no tengo”.
El truco de todo este fenómeno es, que esas chicas si trabajan, “con el número de seguidores que tienen, por las búsquedas que son más de 200.000 millones, se genera un caldo de cultivo excepcional para muchísimas marcas”, explica la experta en redes sociales.
Desde que se levantan hasta que se acuestan están facturando, a un ritmo frenético, “pueden estar cobrando alrededor de los 3.000 euros por publicar un vídeo de 20 segundos en redes sociales”.
Pero esta tendencia, además de tener trampa, puede derivar en problemas psicológicos para quienes las siguen. “Si a mi me están contando continuamente que esto es maravilloso, que esto es genial, que no existe violencia en estas relaciones, pues al final es lo que yo aprendo, lo que acaba guiando mi conducta y mis decisiones”, afirma la psicóloga consultada por Noticias Cuatro, “y esto a mujeres jóvenes les puede influenciar hasta el punto de ponerles en situaciones de vulnerabilidad”.