Miles de cotorras argentinas han invadido los árboles en la localidad de Valdemoro (Madrid), donde ya se han censado 56 nidos de esta especie invasora. Una vecina de la localidad asegura que le da miedo pasar por los árboles donde tienen nidos, porque como los nidos que construyen son tan grandes, le preocupa que se puedan llegar a caer sobre ella. Los nidos de estas aves rondan los 20 o 25 kilos, pero pueden llegar a pesar hasta 100.
Otra vecina dice que se escucha demasiado, que incluso hablando por teléfono le preguntan qué es lo que suena de fondo. También comenta que de vez en cuando les echa pan, porque, aunque sean una plaga, también le dan pena. Otra vecina desde su casa se queja de que le es imposible dormir porque empiezan a cotorrear, además de que en los árboles de enfrente de su casa hay hasta ocho nidos.
Según el Ministerio para la Transición Ecológica, la cotorra argentina es una especie exótica invasora, lo que significa que estos animales producen daños ecológicos, de salud y económicos en el hábitat en el que se asientan. Se caracterizan por su competencia con especies autóctonas por la comida, además de que dañan el cultivo y la vegetación en la que construyen sus nidos. También son una vía de propagación de enfermedades y patógenos para las personas y otras especies.
La concejalía de Medio Ambiente de Valdemoro presenta una solución, la tala de árboles, pero sin que haya animales presentes, debido a que por la Ley de Bienestar Animal están protegidas a pesar de ser una especie invasora. Esta solución no sería muy eficaz, ya que se irían a otro árbol a anidar. Otras posibles soluciones son el uso de trampas, realizar un control de fertilidad o el uso de dispositivos que les ahuyenten. Mientras tanto la concejalía está a la espera de que la Comunidad de Madrid les conceda permiso para actuar.