El Hospital de la Princesa (Madrid) ha conseguido controlar los movimientos provocados por el Parkinson por medio del wifi. Mohamed es un paciente con Parkinson y desde Melilla realiza una videollamada con su neuróloga. Ella desde Madrid puede cambiar los parámetros para ajustarlos de manera que los temblores desaparecen. El gran avance es que ya no necesitan estar juntos de manera presencial.
Lidia López Manzanares, la neurobióloga de Mohamed, comenta que es un paciente que vive en Melilla y que cada vez que tiene que acudir a una cita tiene que tomar un avión. Para lograr este hito, Mohamed tuvo que pasar por quirófano para someterse a una estimulación cerebral profunda. Este avance ha mejorado ya la vida de 15 pacientes y se está avanzando con otras patologías como la distonía o trastornos psiquiátricos como la depresión, el trastorno obsesivo compulsivo, la agresividad refractaria, la esquizofrenia y la anorexia.
Cristina Torres Díaz, neurocirujana del Hospital la Princesa, cuenta que esta operación consiste en la implantación de unos electrodos en el cerebro de los pacientes y lo más laborioso es el cálculo de la trayectoria en la que quieren poner el electrodo. Añade que también se implanta en el pecho un dispositivo generador de pulsos (neuroestimulador) que genera una serie de impulsos eléctricos que mejoran y regulan el funcionamiento cerebral. Ya en la última fase se ajusta y se programa el neuroestimulador.
Este sistema supone una mejora en la calidad de vida de los pacientes con Parkinson, ya que, por un lado, reducen los efectos secundarios que pueden llegar a ocasionar los medicamentos orales, y, por otro lado, evitan que los pacientes tengan que desplazarse largas distancias para acudir físicamente a la consulta. El Hospital de la Princesa es un centro de referencia en todo el país en cuanto a la cirugía funcional de Parkinson, además forma parte del centro de referencia nacional CSUR para cirugía funcional desde 2006.