Un gallego ha dado un nuevo uso a un coche fúnebre. En el pueblo de Malpica, situado en la Costa da Morte, este vehículo sirve para transportar tablas de surf. Víctor González, desde su taller de The Surf Factory, lo adquirió por 300 euros. “Cuando lo compré tenía 118 mil kilómetros”, explica a Noticias Cuatro.
Aunque la idea principal es utilizarlo para trasladar las tablas de surf, Víctor lo utiliza cuando lo necesita como vehículo particular. Así, también está pensando en meter un colchón en su interior. “Igual un ataúd es pasarse un poco, pero seguro que estaría más calentito”, bromea.
En Malpica, este reciclaje despierta opiniones dispares. “Es raro ver estos vehículos y observar tablas dentro”, “Es mejor que lleve eso a un muerto” y “Deberían estar de moda, tendríamos que abrir la mente” son algunos de los comentarios que se pueden escuchar en esta zona de A Coruña.
Víctor González no quiso dejar pasar la oportunidad de tener un coche que le permitiese moverse por la costa a un precio tan bajo. En la ‘Voz de Galicia’, el surfista reconoce que una furgoneta puede costarte unos 6.000 euros. En cambio, tan solo necesitó 300 euros para comprarlo. Y es que nadie puede negarle que su compra le salió de muerte.