Los dos hombres más ricos del mundo se enfrentan en una intensa carrera espacial que promete evolucionar en los próximos meses. Jeff Bezos y Elon Musk se libran en una batalla por conquistar el espacio. Según informa Ana Lorenzo en el video, la llegada de Donald Trump puede ser decisiva en esta guerra de las galaxias tras haber establecido lazos profesionales con el dueño de Space X.  

La guerra por conquistar el espacio se pone cada vez más tensa. El nuevo fracaso de Jeff Bezos en el lanzamiento de su nuevo cohete ha hecho que su compañía Blue Origin de un paso hacia atrás frente a su máximo competidor en Estados Unidos: el Space X del magnate Musk, el hombre más rico del mundo. 

Todo estaba preparado en la estación de Cabo Cañaveral, en Florida. Blue Origin se proponía lanzar el cohete New Glane a las 1.00 horas. Pocos minutos antes del esperado lanzamiento, el artefacto se vio envuelto en problemas técnicos que fueron imposibles de solucionar.  

A través de su perfil de X, la compañía de Jeff Bezos explicaba el incidente que había experimentado su cohete estrella: “Hoy hemos decidido suspender el intento de lanzamiento para solucionar un problema en un subsistema del vehículo que nos llevará más allá de nuestra ventana de lanzamiento. Estamos analizando las oportunidades para nuestro próximo intento de lanzamiento”. New Glane se presentaba como la oportunidad de oro de Blue Origin para llegar a la órbita de forma segura.  

Este aplazamiento se ve nublado por el próximo lanzamiento de la compaña de Musk. Space X tiene previsto el séptimo ensayo de su cochete Starship el próximo 15 de enero. La compañía del hombre más rico del planeta ha anunciado que el despegue será retransmitido en directo en redes sociales a las 16.00 horas. 

El magnate ha dejado claro en la página web de Space X que “este nuevo año será transformador para Starship, con el objetivo de reutilizar todo el sistema en línea y realizar misiones cada vez más ambiciosas a medida que avanzamos hacia la posibilidad de enviar humanos y carga a la órbita de la Tierra, la Luna y Marte”. 

En la batalla entre los magnates ha entrado Donald Trump. Tras haber nombrado a Musk como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental y estrechar lazos profesionales con él, se plantea como posibilidad que el presidente electo de Estados Unidos beneficie al dueño de Space X en su lucha por conquistar el espacio. 

Jeff Bezos ha asegurado que no le preocupa la estrecha relación que mantienen Trump y Musk. Ha declarado además que no cree que influya en sus contratos con la NASA. Mientras, el presidente electo ya ha anunciado que colocará al frente de la Agencia Espacial Estadounidense a un hombre de la órbita de Musk. 

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