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Mineras influencers: un fenómeno creciente en Australia al que cada vez se suman más chicas
Cada vez son más las mujeres que trabajan en el sector minero australiano y que comparten sus experiencias en redes sociales
En Australia se pagan hasta 6.000 euros al mes por trabajar en la minería, pero “no hay días libres”
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En Australia se pagan hasta 6.000 euros al mes por trabajar en la minería. Según informa Gonzalo Aguirregomezcorta en el vídeo, se trata de un sueldo que cada vez atrae a más mujeres, que utilizan las redes sociales para dar a conocer su profesión. Son las mineras influencers, y cada vez hay más.
Australia exporta una tendencia en redes sociales que está levantando mucho interés. Cada vez son más las mujeres que trabajan en el sector minero australiano y que comparten sus experiencias a través de sus perfiles. “Me han subido muchísimo los seguidores en TikTok”, cuenta Virginia, “les encanta que les cuentes tu vida, tu experiencia”.
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Otra de las mineras influencers, Paula García, también tiene su TikTok desbordado, “he quitado las notificaciones porque no puedo más”.
Ellas eligen trabajar en este sector porque “se puede ganar bastante dinerito”, unos 3.000 euros cada dos semanas, pero no es oro todo lo que reluce porque “no libras ningún día y trabajas 12 horas al día”. Lo bueno es que “no tienes ningún gasto, tienes que volar a los campamentos porque suelen estar en zonas remotas”.
Según la oficina de estadística de Australia hay alrededor de 63.000 mujeres trabajando en el sector minero, una cifra que no para de crecer. “Tienen reuniones con nosotros de cuiden mucho el reponer los rollos de papel en los baños de las chicas”, cuenta Paula, “porque cada día tenemos más chicas”.
El hierro y el carbón son los minerales que más exporta Australia y las oportunidades laborales son enormes, pero “entrar en la mina es difícil”, reconoce Paula, “yo tuve suerte”.
Ellas, además, reconocen que no es fácil trabajar en un sector dominado por los hombres, “al principio es un poco intimidante pero luego los conoces y son un amor”.
Hay una gran demanda en los servicios domésticos y muchas chicas deciden ir más allá. “Si vuelvo, definitivamente me meto a las minas”, asegura Paula, “lo tengo claro”. Para vivir y difundir una experiencia única.
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