Israel ya tiene siete frentes simultáneos. Mientras prepara su probable respuesta a Irán -por su último ataque masivo-, combate a la vez contra todas las milicias del Eje de la Resistencia respaldadas por Irán: Gaza, Cisjordania, Líbano, Siria, Yemen e Irak. La pregunta ahora es: ¿Está Israel preparada para esto? Y es que cualquier movimiento en falso, puede acabar extendiendo el conflicto a todo Oriente Medio tras comenzar la incursión terrestre en el Líbano, una guerra que recuerda a la que ya hubo en 2006, según informa Sergio García García y Lidia Chacón.

El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Herzi Halevi, dijo que Israel tiene “un alto nivel de preparación en ataque, defensa y en todos los frentes". Con el último ataque masivo de Irán, Israel confirmó que varias de sus bases aéreas fueron alcanzadas con los misiles balísticos. "No hubo daños que detuvieran las operaciones de la Fuerza Aérea en ningún momento", sostienen desde el Ejército.

Javier Roldán, catedrático de Derecho y Relaciones Internacionales de la Universidad de Granada, indica que Israel "es un Estado con 76 años que se ha creado para defenderse y atacar a los enemigos vecinos". La pelota ahora está en el tejado del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien ya ha avisado de que responderá con ataques. "Las dos respuestas que ha dado ya pueden ser interpretadas desde Tel Aviv como ciertos signos de debilidad", resalta Francisco Girao, director de Defensa de 'Atrevia'.

Los expertos sostienen que Irán no querría una guerra abierta con Israel. “A Irán no le interesa. La respuesta de Hezbolá y de Irán ha sido contenida", subraya el catedrático Roldán. Y es que ha sido más nociva el ataque con un fusil que cientos de misiles. Uno de los objetivos de Israel ahora podría ser la industria petrolera de Irán. “Estados Unidos se opondría a esto supondría el encarecimiento del petróleo", apunta Roldán. Una vajilla que, de romperse, le saldría muy cara al resto del mundo.

El ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, lo bautizó como “la guerra de los siete frentes”. Desde el ataque del siete de octubre en Israel, se activó un conflicto de intereses en todas las zonas donde Irán tiene influencia: Líbano, Cisjordania, Irak, Siria, Yemen, Bahréin y Gaza. Con los ataques continuos en Oriente Próximo, surge la duda sobre si Israel acabará en guerra total.

“El problema de que se convierta en una guerra regional es que afectaría al resto del mundo”, explica Francisco Girao, director de Defensa de 'Atrevia'. Pero Israel parece tener fuerza suficiente para aguantar todos estos frentes. “De manera temporal, es posible realizar incursiones en el sur del Líbano, mantener la campaña de Gaza e incrementar las operaciones en Cisjordania. Se sabe que todo civil en Israel es soldado en potencia”, concluye sobre estos frentes que Israel mantiene abiertos.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.