El palacio de la Moncloa ha sido testigo este jueves de una imagen que no se producía desde hace 447 días: Alberto Núñez Feijóo y Pedro Sánchez reunidos para abordar el aumento del gasto en defensa. Según informan Carlota Núñez e Isabel Sanz en el vídeo, el presidente del Gobierno ha iniciado la ronda de contactos con los líderes de todos los partidos, salvo VOX. Reuniones que, por ahora, sirven para constatar que las posiciones entre el Gobierno y el Partido Popular siguen muy alejadas.

Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo no se habían reunido en 447 días y, aunque ante las cámaras ha mandado la cordialidad, la animada charla que mantenía no ha dado de sí. Por ahora, no hay acuerdo entre el Gobierno y el Partido Popular.

El líder del Partido Popular ha denunciado que Sánchez le ha ofrecido “cero cantidad de información” sobre el gasto en defensa ni cómo se va a financiar ante la situación geopolítica que vive Ucrania y Europa. Además, ha criticado que se pretende hurtar el control del Congreso de los Diputados en este asunto. "Le agradezco el café pero esto lo podíamos haber solucionado con una conversación en el pasillo", ha afirmado Feijóo en una rueda de prensa en el Congreso, después de la reunión, que ha durado poco más de media hora.

Feijóo ha dicho que ha constatado que "a día de hoy" España "no tiene ningún plan" y ha añadido que un Gobierno "que no ha sido capaz de gobernar en la normalidad" está "difícilmente preparado para afrontar la situación extraordinaria", máxime cuando ni siquiera ha sido "capaz de presentar unos Presupuestos".

"Para más inri como presidente del Gobierno no puede hablar en nombre de todos sus ministros", ha resaltado, para insistir en que llegó al Palacio de la Moncloa "sin ninguna información" y no puede decir "que tras 30 minutos tenga alguna información" tras "tres años de silencio sepulcral del Gobierno en política exterior".

Feijóo ha afirmado que el presidente del Gobierno está dispuesto a gobernar "prescindiendo" del Parlamento, pero ha resaltado que "no puede haber un incremento de gasto ni un compromiso internacional sin que previamente esté autorizado por el Congreso de los Diputados, lo contrario conduce a algo muy peligroso, la autocracia".

El líder de la oposición quiere que el aumento del gasto en defensa pase por el Congreso y exige un trato preferencial para su partido en las negociaciones. "Se ha pretendido despachar al primer partido de España con un café", afirma.

El Partido Popular no ha sido el único que ha acudido este jueves a la Moncloa. Pedro Sánchez también se ha reunido con ERC, quienes ponen el foco en la fórmula y su portavoz, Gabriel Rufián, afirma que "la vía es gastar mejor", haciendo equilibrios entre su esencia y sus compromisos, "con nosotros que no cuenten para gastar mas, a no ser que nos expliquen muy despacito y muy bien por qué".

También ha pasado por Moncloa Junts, cuyo diagnóstico es que todo está aún muy verde. La portavoz del partido en el Congreso, Miriam Nogueras, ha dejado claro que el tono del encuentro con el jefe del Ejecutivo ha sido plenamente "informativo" y que esperan que se concreten "más cosas" sobre el posible aumento al 2% del PIB a Defensa y del gasto en seguridad.

Fuentes del partido independentista defienden que el Gobierno debería tener la "máxima" transparencia sobre este asunto y no adelantan el sentido del voto de la formación en el caso de que este asunto llegue al Congreso. De hecho, creen que el planteamiento del Ejecutivo todavía "está muy verde" y no tienen una hoja de ruta concreta.

Esta ronda de conversaciones ha dejado una imagen inédita hasta ahora. Es la primera vez que un presidente del Gobierno recibe a Bildu en la Moncloa. Con este encuentro con la portavoz parlamentaria, Mertxe Aizpurua, se rompe definitivamente el habito de excluir a la formación abertzale de las reuniones en la sede de la presidencia.

Por la tarde, la ronda de contactos ha continuado con el diputado del BNG, Néstor Rego, a quien Pedro Sánchez ha confirmado que "probablemente" el aumento del gasto en seguridad y defensa no se votará en el Congreso. "Le pregunté si esta cuestión iba a ir a debate en el Congreso y me dijo que probablemente no", ha resumido el propio Rego en una rueda de prensa desde Moncloa tras la reunión con el jefe del Ejecutivo.

Rego ha aprovechado el encuentro con Sánchez para trasladarle el "rechazo frontal" de su partido a las intenciones del Ejecutivo y de la UE porque, a su juicio, solo "contribuirá a escalar, más aún, los diferentes conflictos existentes a día de hoy" y supondría una "grave amenaza para la ciudadanía".

El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, se ha mostrado favorable al aumento del gasto en seguridad, pero cree que debería ir acompañado de una inversión en el tejido industrial. Aunque asume que el plan del Ejecutivo tiene que "definirse más" y que este asunto requiere un debate a nivel nacional en el Congreso.

El dirigente vasco aboga por desarrollar un "sistema propio" que no solo aborde el plano militar, sino también el civil, por ejemplo, "invirtiendo en industria" tanto a nivel europeo como a nivel nacional en cada uno de los Estados miembro.

La líder de Podemos, Ione Belarra, ha advertido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que está "cavando su propia tumba" al apoyar el plan de rearme de la UE y ha señalado que por este camino el Ejecutivo "está poniendo la alfombra roja a un Gobierno fascista de PP y Vox".

La secretaria general de Podemos ha trasladado al presidente su oposición frontal a aumentar el gasto militar, que ve "un error catastrófico", y su absoluta certeza de que cada euro que se destine a la compra de armas es un euro que se detraerá del gasto social.

Una de las impresiones que ha sacado de su conversación con Sánchez es que "no tiene la más mínima intención" de someter el aumento del gasto militar al aval del Congreso y que ha sido una reunión informativa sin ninguna voluntad negociadora.

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