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El líder opositor, Edmundo González, niega haber recibido presiones por parte del Gobierno de España para dejar Venezuela. Así lo dice en el cuarto comunicado que lanza para dejar claro que el Ejecutivo no tiene nada que ver. Según informa Carlota Núñez, el Partido Popular -que pedía la dimisión del ministro de Exteriores por permitir un golpe de Estado- se queda sin argumentos y el Gobierno tacha las acusaciones de "falta de lealtad institucional".
El Ejecutivo pide respeto al Partido Popular y desmiente cualquier implicación en las coacciones que recibió Edmundo González en la casa del embajador de España, Ramón Santos. Edmundo González justifica la publicación de este nuevo texto por “las diversas versiones que circulan respecto a una supuesta coacción por funcionarios del Estado español”.
Edmundo González, líder opositor venezolano, envía su cuarto comunicado para zanjar la última polémica: “No he sido coaccionado ni por el Gobierno de España ni por el embajador español en Venezuela, Ramón Santos”. Tras destacar que escribe estas palabras por “las diferentes versiones que circulan”, dejan al PP sin argumentos. Tan solo hace 24 horas, los populares exigían dimisiones y hoy siguen señalando al embajador español, Ramón Santos.
Elías Bendodo, vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local y Análisis Electoral del PP, lo destacó así: “Nuestro embajador ha sido testigo de coacciones”. Y el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, reclama una disculpa, aunque sin dar explicaciones sobre lo que ocurrió en la embajada y sostiene que solo "ofrecieron un espacio seguro para que se reuniese con quien quisiera".
Pese a las declaraciones de González, el PP insiste en pedir la dimisión de José Manuel Albares porque dijo que no había negociado nada con el régimen de Nicolás Maduro. El partido mantiene que la salida del opositor Edmundo González se pactó en la Embajada de España con el embajador como "testigo de las coacciones". Advierten que el Gobierno debería liderar un frente internacional para facilitar el cambio político en Venezuela y deponer al dictador que, según sostienen, perdió las elecciones presidenciales.
Hoy, el diario ‘El Mundo’ publica que el expresidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, tuvo un papel destacado en esta crisis. Así, recalcan que la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, fue dos veces a la embajada tras una llamada suya. “Hay tres Rodríguez implicados: Delcy, Jorge y Zapatero”, sentencia Bendodo. De momento, Zapatero sigue sin decir nada al respecto.
González Urrutia subraya que todas las gestiones de su traslado “fueron supervisadas y facilitadas directamente por el Ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Alabares, asegurando en todo momento su bienestar y libertad de decisión”. Unas palabras que el ministro de Asuntos Exteriores agradece por redes sociales: “Gracias Edmundo González Urrutia por defender la verdad frente a las calumnias e injurias contra España y su servicio exterior”.
Mientras, la maquinaria de Nicolás Maduro sigue trabajando para desacreditar a Edmundo González. El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez, dejó caer que el líder opositor tiene problemas con el alcohol después de difundir unos audios cortados como supuesta prueba.
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