La militancia de ERC vota si avala el acuerdo con el PSC para investir a Salvador Illa

Las bases republicanas votan sobre el preacuerdo del PSC con ERC para investir a Salvador Illa como presidente de la Generalitat. Según informan Marina Pérez y María Galán en el vídeo, se trata de una votación en la que participan 8.500 militantes en medio de una división interna del partido y, por tanto, con mucha incertidumbre.

Salvador Illa, Pedro Sánchez y la cúpula de ERC contienen la respiración. Están todos en manos de los 8.200 militantes de Esquerra Republicana que votan de forma telemática el acuerdo entre socialista y republicanos para que Salvador Illa se convierta en el nuevo presidente de la Generalitat o que todo salte por los aires y haya repetición electoral.

Las bases de ERC llegan a esta votación muy divididas, al igual que el propio partido republicano. Hay un sector muy crítico que no quiere a Salvador Illa al frente de la Generalitat ya que no se fían y le consideran el más españolista del PSC. En la pregunta que tienen que responder ni siquiera aparece su nombre.

El Colectivo 1 de Octubre y las Juventudes de Esquerra piden el no al acuerdo. Unos jóvenes que amenazan la investidura independientemente del resultado de esta consulta. Ellos decidirán por su cuenta este fin de semana el voto de su diputada, Mar Besses, en el Parlament. Un voto que es imprescindible porque las cuentas son muy justas y a Salvador Illa no le puede fallar nadie del PSC, Esquerra y los Comunes.

Según han informado fuentes del partido la pregunta que se formula es: '¿Estás de acuerdo en que Esquerra Republicana vote a favor de la investidura del candidato socialista a cambio de la soberanía fiscal, la promoción y protección de la lengua catalana, la Convención Nacional para la resolución del conflicto político y el resto de medidas acordadas?'.

Fuentes de ERC han remarcado que la Ejecutiva del PSOE ya ha asumido públicamente las medidas acordadas pero que, si los socialistas se desdicen de ellas, esto tendrá consecuencias políticas.

ERC ha desvinculado el preacuerdo de unos eventuales Presupuestos de la Generalitat

Asimismo, han desvinculado el preacuerdo de unos eventuales Presupuestos de la Generalitat, detallando que las medidas pactadas facilitarán la negociación de las cuentas, pero que cuando llegue el momento deberán incluir más reivindicaciones y, si se incumple el acuerdo, tendrán "palanca de fuerza aquí y en Madrid".

Las mismas fuentes han incidido en la diferencia de la Convenció Nacional acordada y la mesa de partidos que proponía el PSC, puesto que, a su juicio, la medida de los socialistas servía para hablar sobre distintas cuestiones que afectaban a Catalunya como infraestructuras, movilidad y proyectos, algo que según los republicanos ya se puede debatir en el Parlament.

Sin embargo, el objetivo de la Convenció Nacional es resolver específicamente el conflicto político, donde cada partido presentará sus propuestas, entre las que se encuentra el referéndum pactado con el Estado que plantean los republicanos.

Diferencia con el concierto vasco

Según fuentes republicanas, el preacuerdo contempla un sistema diferente al del concierto económico vasco porque se aplicará un principio de solidaridad, "reconocida y transparente".

Sin embargo, para el Impuesto de Sociedades, plantean aplicar la misma norma que en las diputaciones vascas, y las empresas que tengan el domicilio fiscal fuera de Catalunya, dependiendo de su volumen de operaciones, podrían tener que tributar en Catalunya.

Consejo rector aeroportuario

Asimismo, las mismas fuentes destacan que cualquier mejora de la capacidad del Aeropuerto de Barcelona tendrá que estar limitada por la prevención de espacios naturales, y se priorizará las conexiones a larga distancia.

Con la creación del Consejo Rector Aeroportuario se garantizará el compromiso de la Generalitat en participar de las decisiones estratégicas en la gestión del Aeropuerto de Barcelona.

Entre los puntos, se encuentra la mejora de conexiones internacionales, el control de reducción de emisiones y asegurar que los vuelos, la infraestructura y la inversión van de la mano de unos objetivos acordados con la Generalitat.