La secretaria de Rodrigo Rato, entre sollozos en el juicio: "Mi vida se acabó personal y profesionalmente"
Teresa Arellano ha declarado como imputada en el juicio por el incremento presuntamente ilícito del patrimonio de Rodrigo Rato
Está acusada de ayudar a Rodrigo Rato a ocultar la ingeniería fiscal con la que presuntamente ocultó su fortuna
Rodrigo Rato se enfrenta a la fiscal en su segundo día de declaración: “El respeto se gana”
Teresa Arellano fue secretaria de Rodrigo Rato durante treinta años en Bankia. Tres décadas en las que compartieron trabajo, ahora comparten banquillo en el juicio por el incremento presuntamente ilícito del expresidente de Bankia. Ella está acusada de ayudar a su jefe a ocultar la ingeniería fiscal con la que presuntamente ocultó su fortuna. En el juicio ha negado todo entre lágrimas, "mi vida se acabó tanto personal como profesionalmente".
Este miércoles, Teresa Arellano, secretaria de Rato en Bankia, ha declarado como acusada en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid por el incremento presuntamente ilícito del patrimonio del que fuera presidente de la entidad bancaria.
MÁS
En su declaración, Arellano ha negado haber sido directora general adjunta de Comunicación y Marca en la entidad y ha aseverado que no perteneció a ningún órgano de dirección del banco. "Es que es imposible haber sido alto cargo. No sé cómo decirlo. Llevo ocho años y medio volviéndome loca. Porque es que no he sido. Solo he sido coordinadora de comunicación, publicidad y marca en el año 2012", ha indicado visiblemente afectada.
La exsecretaria de Rato ha roto a llorar recordando el momento de su detención y el registro de su domicilio. "Me trasladaron a Tres Cantos donde permanecí dos noches en una celda", ha contado entre lágrimas, "mi vida se acabó tanto profesional como personalmente, es una situación que no logro superar".
Teresa Arellano asegura que ella "sólo daba curso a las necesidades"
El hecho de que no tuviera capacidad de decisión es relevante para la causa dado que eso le impedía tener voz y voto sobre contratos con proveedores como podrían ser Publicís y Zenith. En este sentido, ha explicado que ella entró a coordinar el departamento de Comunicación por orden de Rato y tras la salida de Pilar Trucios del cargo de directora, pero ha matizado que ella "sólo daba curso de las necesidades y no podía ni valorar".
"Los proveedores los elegía el departamento de Compras, no he intervenido en mi vida en decir qué proveedor" contratar, ha explicado, para añadir que solo firmó un contrato en 2012 para renovar con Publicís y Zenith pero que previamente había sido aprobado y adjudicado en 2011.