El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, convirtió su mandato en una red para beneficiar a sus más allegados con el desvío de dinero de la institución. Esa es al menos la tesis del juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda, que desde 2022 investiga los negocios de la cúpula de la RFEF. Ahora, es la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil la que encabeza una operación en busca de pruebas. Según sus sospechas, Rubiales y sus principales colaboradores se enriquecieron presuntamente con varios contratos de la Federación al menos desde 2018.
Para afianzar estas pesquisas, los agentes registran 11 domicilios particulares y oficinas, y tienen planificadas siete detenciones. Su trabajo se centra en varias operaciones concretas y entre ellas estaría el contrato millonario que llevó la Supercopa a Arabia Saudí, polémico por la intermediación del jugador Gerard Piqué, todavía en activo. La firma de ese contrato en 2019 supuso la presentación de la querella que impulsó en un primer momento esta investigación, dando lugar a las Diligencias Previas 338/22.
Según fuentes del caso, entre los principales detenidos estarían el abogado Tomás González Cueto y Pedro González Segura, mano derecha de Rubiales en la Federación. El expresidente, investigado también por la Audiencia Nacional tras el beso forzado a la jugadora Jennifer Hermoso, se encontraba en República Dominicana cuando ha comenzado el operativo, por lo que se ha comprometido a regresar a España en las próximas horas.
Entre los contratos investigados, según ha podido confirmar Noticias Cuatro, se encuentra el convenio firmado por la Federación con China para construir una ciudad del Fútbol en Pekín y participar en distintos programas para impulsar el fútbol dentro del país asiático. Según las primeras pesquisas, los directivos de la Federación Española habrían contratado distintos servicios a dedo con empresas de amigos o familiares, para conseguir después presuntamente un retorno de esos fondos a su patrimonio particulares.
Los investigadores analizan si eso fue lo que sucedió por ejemplo con la reforma que la Federación acometió en el estadio sevillano de La Cartuja en 2020. En este caso, parte de las reformas fueron contratadas con una constructora vinculada a un hermano de un alto directivo de la federación, que se encontraría entre los ahora detenidos.